Han pasado casi cinco años desde que el exvocero de Fuerza Popular Jorge Trelles mencionó en una entrevista con el periodista Beto Ortíz la frase: “Nosotros matamos menos”. Inmediatamente después de aquella declaración, Trelles fue destituido del cargo. “Jorge, ya no eres más vocero”, recuerda que le dijo Keiko al exdirigente. Faltaban tres semanas para la segunda vuelta que enfrentaba a Keiko Sofía Fujimori y a Ollanta Humala. Las encuestas le daban cuatro puntos de ventaja a la hija del encarcelado expresidente. Luego, Humala le daría vuelta. “No creo que la declaración de un vocero defina una elección”, reflexiona casi un lustro después Jorge Trelles, retirado de la vida partidaria. Pero antes de recordar aquel momento, el exministro fujimorista analiza la actual situación de Fuerza Popular y el evidente “doble liderazgo” en el partido naranja.
Cómo analiza a esta nueva Keiko Fujimori que busca tender puentes con la izquierda, que convoca a exrivales políticos como Vladimiro Huaroc, que respalda el trabajo de la CVR en Harvard. ¿Estamos viendo una metamorfosis, una “caviarización” de Keiko Fujimori o es todo parte de una estrategia para ganar más votos?.
Para entender el camino de Keiko hay que recordar que su primer deber como jefa de Fuerza Popular es ganar las elecciones. Entonces, me imagino, se ha hecho un análisis político de las elecciones. Y es obvio que en el fondo, en el país, hay una polaridad Fujimorismo y antifujimorismo. En la última elección, el antifujimorismo, encabezado por el señor Humala nos ganó. Entonces, me parece razonable tratar de limar las asperezas que pueda haber con toda esa gente que es antifujimorista. Ser político es tener cintura. Entonces a veces te vas a la derecha, a veces a la izquierda. Esa es la política. Si es que eso va por los cauces de la democracia.
Fujimori tiene un voto duro. ¿No cree que estos jales puedan restarle?
Si lo que está haciendo Keiko es correcto o incorrecto, se verá después. Yo no creo que sea el momento de cuestionar su liderazgo, hay que entenderlo.
Cómo ve la evaluación que viene haciendo para la selección de los candidatos a congresistas. ¿Esto ha creado una división?
Eso es exactamente igual a cuando un entrenador de fútbol escoge al equipo. El que no juega se molesta. Es así la política. Cuando viene tiempo de elecciones son más los que quieren ser congresistas que los que son elegidos.
¿Usted comparte la opinión de Alberto Fujimori cuando exige que estén sí o sí los llamados “históricos”?
Puede ser que tenga razón. Pero yo creo que por encima de todo está el respeto a lo que piensa la lideresa y el comité que la acompaña. Lo que pasa es que en Fuerza Popular hay una cosa que normalmente no pasa en la política: hay un doble liderazgo que a mi juicio no es sano.
¿Afecta mucho este doble liderazgo en el Fujimorismo?
Yo creo que ha aparecido recién un reclamo en la conformación de las listas. Pero en verdad, espero que eso no vaya a más y que seamos razonables. Lo peor que le puede pasar al fujimorismo es perder las elecciones. Estas elecciones tenemos que ganarlas. Las encuestas nos dan una ventaja importante, aunque soy consciente de que es en la segunda vuelta que se jugará todo. Pero creo que es tiempo de apoyar al liderazgo legítimo.
¿Qué es de...?
Que es el de Keiko. Además es un liderazgo que todos se lo hemos dado. Ella es la encargada de llevarnos al gobierno. Si no lo hace, será el momento de criticarla. Pero ahora no es el momento.
Hace cinco años usted aseguraba que Alberto Fujimori -desde la Diroes- no manejaba la campaña. ¿Sigue pensando lo mismo?
Yo estuve muy cerca de la campaña y le puedo asegurar que quien manejó la campaña fue Keiko y su equipo. Un diálogo con el presidente Fujimori había. Yo iba a visitarlo todas las semanas. Pero quien dirigía la campaña era Keiko. Digamos, quien maneja el Fujimorismo desde el 2011, quien dirige la bancada, quien establece la línea fundamental es el Partido Fuerza Popular. Y allí está Keiko.
Hasta que viene el padre y le enmienda la plana...
Él lo que dice es: respeta a estos cuatro leales colaboradores (Martha Chávez, Luisa Cuculiza, Luz Salgado, Alejandro Aguinaga) que son cuadros de primera. Sin embargo, creo que todos tenemos que sujetarnos a lo que es la estrategia política. Y si sucede que por la propaganda contraria habemos quienes no aportamos, el mundo no se acaba si uno no es congresista, si uno no es ministro. Creo que hay que saber tener una cierta disciplina y obedecer (...) en todo caso, si no se les considera, sí merecen una explicación. Porque lo cortés no quita lo valiente.
“MATAMOS MENOS”
Me gustaría remontarme a cinco años atrás cuando usted tuvo esa desafortunada frase “nosotros matamos menos”...
En política hay cosas que no se pueden decir. La realidad es que hubo un conflicto interno entre Sendero Luminoso y el Estado peruano que comienza con el presidente Belaunde. Ese conflicto tiene varias fases y la fase menos cruenta es la del presidente Fujimori. Ese es un hecho.
Entonces, ¿usted justifica las muertes por un contexto de guerra interna?
La guerra es la decisión de enfrentarse con un enemigo con armas, desgraciadamente. El MRTA y Sendero Luminoso tenían armas y asesinaban, volaban. Hubo una guerra pues... Murió mucha gente, es cierto...
Volviendo al tema de la frase. Faltaban tres semanas para las elecciones. Ocurre esto y Keiko Fujimori le llevaba cuatro puntos a Humala. ¿Usted cree que su frase provocó la derrota de Keiko Fujimori?
(Sonríe) Es una frase dicha por un dirigente. Yo creo que la derrota se produce porque Humala abandona la Gran Transformación, se corre al centro y firma el pacto con Mario Vargas Llosa.
¿Luego de aquella declaración hizo alguna autoreflexión porque, finalmente, a usted le cuesta el cargo de vocero?
En ese momento, la reacción de Keiko es políticamente explicable. Ella reacciona, estábamos peleando voto a voto.
¿Qué le dijo ella?
Me llamó y me dijo: “Oye Jorge, no puedes seguir siendo vocero”.
¿Y usted qué le respondió?
“Tienes razón”, le dije. Así es el fútbol.
¿Se sintió como un director técnico destituido?
Como un jugador que cometió un penal. Así es el fútbol, así es la política.
¿No se arrepiente de haber dicho “Nosotros matamos menos”?
No creo que yo haya decidido una elección. No creo que usted cambie su voto 24 horas antes por la frase de un vocero. Pero puede ser que sí. Así no es... (sic) Yo creo que nos gana la elección la jugada maestra de Mario Vargas Llosa y Humala.
Culminada la campaña, ¿hubo alguna autocrítica de los errores cometidos después de la campaña?
Me imagino... Cuando acaba la campaña luego viene el trabajo de la bancada. Yo he conservado la relación de amistad con Keiko, pero no he participado ya en el partido.
¿No extraña la contienda política ahora que le toca verla como un televidente más?
Si usted ve que el equipo de sus amores está con tres goles adelante, así usted esté en la tribuna, uno está contento.
¿No le tienta un cargo de ministro?
No. Creo que todo tiene su momento. Como consecuencia del fin de la crisis con Fujimori, apareció una generación de cuarentones, todos con maestrías en el extranjero y que son muy capaces. Eso se ve en este régimen. Usted puede rescatar al ministro de Economía, al ministro de Transportes, al de Educación. Hay una burocracia cuarentona más joven que creo debe entrar al Gobierno. Yo confío mucho en los cuadros del partido.
¿Usted sigue siendo del partido, es un miembro más de Fuerza Popular. Es decir, todavía tiene carné?
Mire que no sé. Pero yo soy fujimorista.