El aun prófugo empresario Martín Belaunde Lossio aseguró que no recibe ayuda del gobierno, sino por el contrario el Poder Ejecutivo lo persigue por ser peligroso políticamente. Las declaraciones las brindó desde Bolivia en una entrevista para el programa Día D.
“¿Quién podría ayudarme del Gobierno si el Gobierno me persigue? La derecha me persigue mediáticamente a través de sus voceros políticos pero quien me persigue policialmente y criminalmente e incluso ha intentado meter un equipo de policías aquí, a Bolivia, es el Gobierno”, precisó
De esta manera Martín Belaunde Lossio deslindó su relación con el actual gobierno e indicó “Creo que me persiguen porque les puedo ser peligroso en el sentido político eso lo tengo claro”.
Asimismo refirió que para salir del país usó su propia estrategia y que solo lo ayudaron algunos amigos. “Yo ingresé (a Bolivia) el 1 de diciembre por Desaguadero, todas las demás teorías son mentiras”, aclaró.
Sin embargo dijo que es su caso no se aplicó el dicho de que “cuando la policía te quiere atrapar, te atrapa”. "En mi caso no fue así, es lo único que te puedo decir”,
Por otro lado, Martín Belaunde Lossio dejó entrever que no confía en la justicia peruana. “Me entrego y qué… ¿Me voy a comer 18 meses en la cárcel para que después digan ‘sal, compadrito, nos equivocamos’? Eso no es justicia”, dijo.
ANTALSIS: Martín Belaunde Lossio aseguró no tener vínculos laborales con esta empresa y que solo habría una amistad con su gerente general en el Perú, Juan Carlos Rivera Ydrogo, quien financió las campañas presidenciales de Humala.
Reiteró que nunca usó los nombres ni del presidente Ollanta Humala, ni de su esposa Nadine Heredia para lograr la concesión de obras a favor de la empresa española, "lo que hice fue haberles conseguido profesionales para el trabajo de construcción, rentarles maquinaria pesada para iniciar su trabajo, hice una sola sub contrata por un millón y pico de soles esa es toda mi vinculación con Antalsis".
Aseguró más bien que la pareja presidencial lo usó, ya que entre el 2011 y 2014, sus allegados lo buscaron para “acceder” al titular de la región Cajamarca, Gregorio Santos, con el objetivo de reducir el clima de tensión que se vivía en esa zona del país a raíz de las protestas contra el proyecto minero Conga.
“Yo lo único que sé es lo mío, mis cosas, yo no soy culpable de nada, nunca he cometido un delito, ni en la Centralita ni en Antalsis, no he sido funcionario público”, finalizó.