Mientras la ejecución del proyecto Majes Siguas II no tiene ni el 50% de avance, para la empresa supervisora el trabajo ya terminó y la Autoridad Autónoma de Majes (Autodema) tendrá que hacer un pago adicional para que siga los siguientes 4 años.

El gerente de Autodema, Arturo Arroyo Ambia, señaló que se encuentran en negociaciones con la empresa Supervisor Especializado Majes Siguas II para determinar con claridad varios puntos, entre ellos las actividades que les correspondería controlar a la empresa en los 4 años que faltan ejecutar las obras.

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También se tendrá que definir si corresponde pagar y de ser así, fijar el monto a través de una adenda 3, porque bajo la percepción de la supervisora, su trabajo terminó, considerando el plazo del contrato que fue por 42 meses (3 años y 5 meses), desde el año 2016, pero bajo la postura de Autodema, no sería así.

“Lamentablemente, según la supervisión especializada ya venció los plazos, pero como concedentes tenemos que reclamar. Estamos en negociación”, dijo.

PRIORIDAD ES REACTIVAR LA SUPERVISIÓN DEL PROYECTO MAJES SIGUAS II

El interés del momento es reactivar el servicio de supervisión, porque el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) exigió que la supervisión esté activa para desembolsar los 48 millones de dólares que hace falta para cumplir con el quinto desembolso a la concesionaria Cobra.

Según los plazos establecidos, este quinto desembolso debe concretarse 15 días después de haberse firmado la adenda 13 y temen incumplir con los plazos.

Los trámites de reactivación de la supervisión no demorarán solo unas semanas, sino al menos un mes, por lo que, en opinión de Arroyo, la firma de este adicional entre el Gobierno Regional de Arequipa y la concesionaria Cobra se retrasará y se concretará recién junio.

Tanto la gobernadora Kimmerlee Gutiérrez como el  gerente de Autodema, estimaron hace unas semanas que la firma del adicional se rubricaría la quincena de mayo.

• 433 mil dólares es lo que aún adeuda la Región a la supervisora por la adenda 2.
• La adenda 13 implica una inversión de 104 millones de dólares y consiste en el cambio de la infraestructura de riego, de canal abierto por tuberías.