A pesar de que Áncash enfrenta un duro momento debido al preocupante incremento de las muertes y contagios por COVID-19, un sector de la población sigue haciendo caso omiso a las medidas sanitarias que buscan frenar el incremento de los casos.
Fiesta
La noche del viernes último, policías y serenos llegaron hasta una vivienda en el sector Villa Las Flores, en Chimbote, donde se venía realizando una fiesta en pleno toque de queda.
Según la información de la Gerencia de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Provincial del Santa (MPS), en el inmueble estaban 13 pobladores, entre ellos menores de edad y adultos mayores, festejando un cumpleaños.
Al notar la presencia de los agentes del orden, estas personas intentaron huir de la vivienda, pero finalmente se desistieron.
Efectivos policiales procedieron a identificar a los presentes, a través del documento de identidad nacional; sin embargo, un integrante de la familia -en aparente estado de ebriedad- se negó a identificarse y usó a su hija con habilidades especiales para no ser intervenido.
En la casa se halló varias cajas de cerveza que fueron incautadas.
Locales
De otro lado, el personal de la MPS, en un trabajo conjunto con el municipio distrital de Santa, logró incautar más de 27 cajas de cervezas vacías y 3 llenas en un operativo realizado en dos bares clandestinos del centro poblado de Rinconada.
Las autoridades llegaron hasta los locales y comprobaron que estos no cuentan con licencia de funcionamiento, pero se dedicaban a vender licor. En estos establecimientos también ocurre aglomeración de personas.
“Se acudió a estos negocios que ni si quiera cuentan con licencia de funcionamiento y se procedió a la incautación”, indicó el subgerente de Comercialización y Licencias de la MPS, Rafael Vásquez, quien indicó que Rinconada es considera zona crítica.