Nueve meses de prisión preventiva ha solicitado la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Nuevo Chimbote para el dirigente de construcción civil Carlyen Jan Pierre Mondragón Torres (28). Este pedido llega dos días después de que este se entregara a la Policía y confesara que el sábado 12 de junio asesinó a Fernando José Carlos Pérez. Pese a esta confesión, el asesino fue enviado a su casa por “falta de flagrancia delictiva”.

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Desde el Ministerio Público informaron que “luego de recabar los elementos de convicción necesarios para determinar la responsabilidad en un ilícito penal”, el fiscal Jorge Vega Aguilar solicitó la medida coercitiva por la presunta comisión del delito de homicidio calificado.

También dijeron que el magistrado “determinó la existencia de fundados y graves elementos de convicción para estimar razonable la comisión del delito de homicidio calificado en agravio de Fernando José Carlos Pérez como son; el acta de intervención policial, la pericia balística, la declaración de los testigos”, aunque no menciona la confesión del dirigente.

El crimen

El hecho ocurrió la tarde del último 12 de junio cuando la víctima se encontraba reunida con siete personas frente a la segunda puerta de la Universidad Nacional del Santa, en la urbanización Nicolás Garatea, en Nuevo Chimbote. De pronto, Mondragón Torres llegó en una motocicleta y disparó tres balazos, en la cabeza y tórax, de la víctima.

Mondragón Torres huyó del lugar y durante su fuga lanzó al techo de una bodega, un morral color negro, el cual contenía un arma revólver calibre 38.

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Las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona permitieron identificar plenamente al homicida, quien fue citado por la Policía.

Pero antes, el dirigente, a través de su abogado Jesús Gonzales Rentería, confesó el crimen “porque días antes la Fernando Carlos lo atacó en la disputa por la guardianía de una maquinaria en la urbanización Nicolás Garatea, donde se ejecuta una obra”.

El letrado afirma que su patrocinado “quiso dispararle en la pierna para amedrentarlo y hacerse respetar”, pero terminó asesinándolo y ahora “está arrepentido”.

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Deudos protestan

De otro lado, los familiares de la víctima protestaron ayer en el asentamiento humano Belén, en Nuevo Chimbote, y exigieron justicia.

Pedro Carlos, padre de la víctima, dijo sentirse indignado porque en pleno velorio, a su casa fueron dos veces más de 30 policías, quienes ingresaron a su casa para registrarla.

“Pido justicia, por qué no detuvieron antes a ese asesino, ahora ya se escapó”, dijo.

Carlos Pérez deja en la orfandas a su bebé de un año y dos meses de nacido, además su esposa tiene cinco meses de gestación y corre el riesgo de perder a su bebé por el impacto que le causó la muerte de su pareja.

Al cierre de nuestra edición, el Poder Judicial aún no fijaba la fecha de la audiencia.