Q´eswachaka, lugar sagrado, lugar donde se yergue rebelde el último puente inca en el distrito de Quehue, provincia de Canas, nuevamente muestra al mundo su belleza indomable junto a un moderno centro de interpretación, obra ejecutada por el Gobierno Regional mediante la Gerencia Regional de Comercio Exterior y Turismo, en convenio con el gobierno local de esa jurisdicción.
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El gobernador regional, Jean Paul Benavente, destacó la importancia de esta infraestructura porque permitirá informar a los visitantes nacionales y extranjeros, así como a la población local sobre la importancia de este legado cultural, construido exclusivamente con sogas hechas con fibra vegetal.
De igual manera, dará información sobre los valores naturales, culturales de la provincia caneña, así como permitirá realizar diversas exposiciones de artesanía y gastronomía. El centro de interpretación de Q’eswachaka consta de cuatro componentes; entre ellos, accesos y rutas, mirador turístico, áreas de descanso, paradero turístico, estacionamiento, instalación de barandas, servicios higiénicos.
La autoridad regional, subrayó que esta obra contribuirá a rescatar las tradiciones de nuestros antepasados y valorar su herencia expresada en esta formidable estructura de tránsito peatonal instalada sobre el río Apurímac.
“Gracias a la labor que desarrollan los pobladores de Quehue, las generaciones heredan los conocimientos y sabiduría ancestrales para conservar el puente Q’eswachaka, símbolo de la extraordinaria ingeniería inca que sorprende al mundo, pero también, ahora con esta nueva infraestructura se pone a este importante lugar en la vitrina del mundo”, refirió.
LEGADO ANCESTRAL.
El puente Q’eswachaka, paradigma vivo de la cultura milenaria peruana, mide 33 metros de largo y 1.20 metros de ancho. Su construcción se hace sobre la base de grandes sogas trenzadas con fibra de q’oya ichu y chachacomo. El ritual ancestral de renovación se ejecuta cada año en la primera semana del mes de junio con la participación de aproximadamente mil pobladores, hombres y mujeres de las comunidades quechuas de Huinchiri, Chaupibanda, Choccayhua y Ccollana Quehue, ubicadas en el distrito de Quehue.
Los comuneros se reúnen siguiendo una organización hereditaria basada en la ‘minka’ (participación mutua). Los comuneros quechuas consideran que este trabajo no solamente es un medio para mantener en buen estado una vía de comunicación, sino también es una forma de estrechar los lazos sociales.
Asumen esta práctica tradicional como un elemento fundamental de la identidad cultural de la población de Quehue y representa el vínculo que se establece con la naturaleza y con la historia.
Como parte de este ritual de renovación se realizan ceremonias de ofrenda a la Pachamama o Madre Tierra y a los Apus o espíritus tutelares a cargo de un sacerdote andino. El ritual de edificación del puente antiguo se desarrolla siguiendo un programa de cuatro días hasta concluir la importante obra antigua.
DATO:
- El puente Q’eswachaka, fue construido por los incas hace más de 500 años como parte del Qhapaq Ñan y es el único que sobrevive hasta nuestros tiempos gracias a la perseverante e infatigable labor de cuatro comunidades quechuas.