El miércoles 24 de mayo al promediar las 4 de la tarde, Ana Benites Pichuca, de 26 años, natural de la comunidad nativa sector Boca Pagoreni (Satipo), se encontraba realizando trabajos en la chacra, cuando de pronto una serpiente jergón le mordió la pierna izquierda.
Desesperados, los socorristas llamaron al hospital por una ambulancia, pero mientras el vehículo demoraba en llegar al lugar, se valieron de una moto para llegar al río Anapati, y resumir así el traslado.
Del otro lado, los familiares de la víctima, caminaron cerca de una hora por la agreste selva hasta que por fin encontraron a Ana Benites, tendida en el suelo y retorciéndose de dolor.
Después que se le brindó los primeros auxilios para estabilizarla, con la ayuda de los familiares, improvisaron una camilla a base de madera y lograron sacarla en hombros hasta llegar al afluente, pero por desgracia no lograron cruzarlo porque su caudal había crecido.
La salud de la víctima es estable y todo parece indicar que se recuperará del ataque. Ella llegó al hospital de Pangoa.
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