Entre la vida y la muerte se encuentra Luis Alberto Napa Díaz; padre de siete menores de edad, quien fue embestido por una camioneta cuando intentaba cruzar la carretera panamericana sur, altura del kilómetro 198, jurisdicción de Chincha Alta. Su hermana Rosario solicitó ayuda para afrontar el tratamiento médico que recibe este hombre que permanece inconsciente, mientras el conductor del vehículo esta no habido.
La tarde del sábado último Luis Napa salió de su vivienda y se dirigió a cortarse el cabello. Se despidió de su familia y marcho. Su esposa y sus hijos esperaban en su domicilio que retorne, pero caída la noche no había información sobre su paradero. Minutos después de las 22 horas de ese día la Compañía Salvadora Chincha B38 recibe un llamado de emergencia; había un hombre malherido en la pista y necesitaba atención médica.
Los bomberos brindan el auxilio y derivan al accidentado como NN al servicio de emergencia del Hospital San José. Al día siguiente se identificó al herido. Su esposa y hermana han cuidado de él, quien por su delicado estado de salud fue hospitalizado en el área de trauma shock. Napa Diaz esta inconsciente, conectado a un ventilador mecánico, urge que un neurocirujano evalúe las lesiones que presenta y se inicie tratamiento inmediato.
Mientras la familia atraviesa este drama el conductor del vehículo que participó en este accidente esta desaparecido. En las imágenes que registraron las cámaras de seguridad de una estación de servicios y de vecinos del lugar se determina que este hombre trataba de cruzar la vía y avanza al estar despejado el carril de norte a sur, y cuando ingresa al otro carril es arrollado por una camioneta, que al parecer recorría en alta velocidad este tramo urbano.
El chófer de esta unidad tras lo sucedido sigue su trayecto con dirección al sur, sin prestar auxilio al peatón que había embestido. “Mi hermano ha cruzado tranquilo y casi al salir es impactado por un vehículo que venía a toda velocidad. Que esa persona que atropello a mi hermano se ponga la mano al pecho, porque ni siquiera ayudo a mi hermano, lo dejó allí tirado. Eso no se hace”, manifiesta Rosario Napa.