Por 16 años, más de mil alumnos de primaria de la Institución Educativa Juan XXIII, ubicada en la calle Lima, se encuentran en grave peligro, ya que a solo unos metros de sus aulas se encuentra la pesada estructura de la capilla San José, la misma que ha sido declarada en alto riesgo y a punto de colapsar, pudiendo generar pérdidas humanas si se derrumba.
Preocupación por el peligro
Ayer, los padres de familia del colegio, que está situado en pleno centro de Ica, con pancartas en mano realizaron un plantón en las afueras de la Municipalidad Provincial de Ica, exigiendo que se coordine de manera prioritaria las acciones para que la capilla sea demolida, ya que el terremoto del 15 de agosto del 2007 la dejó con daños severos daños en todos sus ambientes y representa un grave peligro para los más de 1100 niños y niñas que estudian al costado, también a la población que transita por la zona.
“Pedimos que se proteja la vida, tengo 42 años y también estudié en el colegio Juan XXIII y siempre la capilla ha estado en mal estado, ahora esta devastada y debe ser demolida, los niños se encuentran en peligro y no debemos esperar que pase una desgracia, sabiendo que Ica es una zona altamente sísmica”, declaró Denise Garcés, madre de familia.
Autoridades indiferentes
Frente al tema, el director de la I.E. Juan XXIII, Leonel Figueroa Cordero, respaldó el pedido de los padres de familia. Indicó que desde que asumió la dirección general del plantel educativo en el 2015, ha reiterado mediante documentación, reuniones y otros el pedido de demolición para garantizar la seguridad de la comunidad educativa. El pedido ha sido dirigido múltiples veces a la Dirección Desconcentrada de Cultura de Ica, GORE Ica, Obispado, Dirección Regional de Educación de Ica, UGEL Ica, Municipalidad de Ica y otros, sin embargo, hasta la actualidad no hay ninguna acción concreta para que los menores estudien en ambientes que no tengan que colindar con la infraestructura a punto de derrumbarse, principalmente la cúpula de más de 20 metros de altura y que podría caer.
”Por muchos años solicitamos la demolición de la capilla y la principal traba es que la consideran patrimonio histórico, pero en el interior hay sujetos que consumen bebidas alcohólicas, drogas, hay colchones, pornografía, latas de terocal, DNI robados, y lo han convertido en un basural, entonces eso no es nada histórico, además que por encima de todo está el derecho a la vida”, declaró.
El 20 de mayo del 2022, la Subgerencia de Gestión de Riesgos y Desastres de la Municipalidad Provincial de Ica, emitió el informe N°006-2022, donde se concluye el “riesgo alto y el colapso de la estructura, en cuanto a la edificación de la iglesia San José que colinda con la institución educativa”. Por esta situación, en marzo del 2023, la Fiscalía de Prevención del Delito de Ica, indicó que se ha aperturado una carpeta fiscal penal en contra de Alberto Martorell Carreño en calidad de director de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Ica y contra Ana María Ortiz de Zevallos Madueños en calidad de exdirectora de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Ica por presunto delito de omisión, rehusamiento o demora de actos funcionales, en agravio del Estado peruano.
“En los últimos temblores, se caen pedazos de adobe, cuando hay lluvias también se cae y por eso pusimos un cerco de rejas de metal para que los alumnos no pasen porque es un peligro, pero lo urgente es la demolición”, finalizó Figueroa Cordero.