La racha de asesinatos continúa enlutando a las familias de la provincia de Pisco, donde hasta la actualidad se vienen contando unas 37 muertes durante el año 2023, todas ejecutadas de manera violenta por los verdugos que llegaron con balas y plomo a terminar con la vida de estas personas.
Acribillado
La última ejecución se realizaría la noche del miércoles 19 de julio en el populoso barrio de La Pascana, donde una persona recibiría tres impactos de bala cuando volteaba en una esquina, afectándole órganos internos que finalmente acabarían con su existencia en el nosocomio pisqueño.
El ataque a este transeúnte, identificado como Robert Etner Arellano Gómez (24), se produciría entre las intersecciones de las calles San José y Cieneguilla, donde se encontraba un grupo de jóvenes conversando, apareciéndose de la nada dos personas a bordo de una moto lineal de donde le dispararon en tres oportunidades.
Aunque Arellano Gómez sería colocado en la tolva de la camioneta del serenazgo para llevarlo al Hospital San Juan de Dios, los galenos que lo atendieron en el área de trauma shock solo confirmarían su muerte a los pocos minutos que ingresó el cuerpo al referido hospital pisqueño.
Hipótesis
Su muerte estaría relacionada con un posible ajuste de cuentas porque Robert Etner, alias “Zorrito”, presenta denuncia por microcomercialización de drogas y consumo de sustancias ilícitas, además de investigaciones en curso relacionadas por estos delitos cometidos durante los años 2019 y 2020 respectivamente.
Tras el retiro del contingente policial, la ola de asaltos a mano armada, extorsiones y la ola de crímenes se ha vuelto a presentar con más ferocidad. Pisco es tierra de nadie.