Bajo la lupa del Ministerio Público se encuentran dos efectivos policiales de la comisaría de Zarumilla, quienes fueron intervenidos en su centro de trabajo tras ser denunciados por, presuntamente, haber cobrado una coima a un joven.

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Se trata de un suboficial de segunda, de iniciales D.R.M., y otro de tercera, de iniciales A.L.B., quienes afrontan una investigación por la aparente comisión del delito contra la administración pública en la modalidad de cohecho pasivo propio.

La fiscal a cargo de las diligencias es Ericka Solis Castro, de la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios. Los trámites de ley se llevan a cabo en el distrito de Tumbes, en la sede de la Dirección Contra la Corrupción (Dircocor), de la Policía.

DENUNCIA

Un joven de iniciales R.B.B. (23) denunció el último martes ante la Dircocor y Fiscalía Anticorrupción sobre la exigencia de una coima por parte de dos agentes.

Según refiere el denunciante, él se encontraba movilizándose en un motokar por el eje vial de la ciudad de Zarumilla, cuando fue intervenido por dos efectivos, quienes a su vez realizaban un operativo a bordo de una moto de la institución policial.

Al entregar su DNI para ser identificado, el denunciante afirma que los agentes le advirtieron que se encontraba con una orden de requisitoria vigente.

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Para dejarlo libre, indica que le exigieron el pago de 3,000 dólares en efectivo, pero en ese momento solo contaba con 1,000 dólares, por lo que finalmente ese fue el monto que entregó.

Al alertar sobre lo sucedido a las autoridades competentes se realizó un operativo en la comisaría de Zarumilla.

En la dependencia policial, se dispuso que todo el personal que realiza servicio motorizado se formara en el patio, es así como el denunciante reconoció a dos agentes como las personas a las que les entregó los dólares; además reconoció la unidad policial asignada a ambos efectivos.

Sin embargo, al realizar el registro personal y domiciliario de los sospechosos no se encontró el dinero.