Por estos días, la actriz Cindy Díaz protagoniza “Fieras”, junto a Fiorella Pennano, Alicia Mercado y Stephany Orúe. Se trata de una adaptación de la comedia “La fierecilla domada”, de William Shakespeare, escrita por Mateo Chiarella y dirigida por Norma Martínez. “Esta obra toca un tema súper importante y necesario para este momento, y parte de una pregunta: ¿qué tan relevante es traer una obra de hace cuatro siglos a este siglo?”, cuestiona la actriz.
¿En esta época, la obra de Shakespeare tiene algo importante que decirnos?
Al compartir experiencias con las chicas de la obra, nos dimos cuenta que es muy necesario poner esta obra como tema de conversación en este momento. Hemos hecho un gran grupo con ellas y bajo la dirección de una de mis actrices favoritas.
¿No habías trabajado antes con Norma Martínez?
Tuve la oportunidad de trabajar en Colombia y cuando estuve allá me hablaban de ella. Yo me preguntaba cuándo se hará realidad este sueño de compartir una obra. Cada vez que me preguntaban ‘con quién te gustaría trabajar’, siempre respondía: con Norma Martínez, y cuando ella me llamó, yo misma me dije: ‘se me hizo’.
Pero estuvieron juntas en el cine. Nosotras trabajamos juntas en “El evangelio de la carne”, ahí tuvimos oportunidad de conocernos pero no cruzamos escenas. Siempre estuvo eso de ‘ojalá en algún momento podamos trabajar juntas’ y, precisamente, en esta obra se concretó.
Todos conocemos su trabajo actoral, pero solo los actores a los que ha dirigido pueden decir cómo es Norma dirigiendo…
¡Maravillosa! Sabe sacar lo mejor de cada una de nosotras, nos da muchísima confianza y seguridad. Estamos siempre creando en escena y creo que eso es riquísimo para un actor, estar siempre creando y siempre en acción.
¿Y cómo ves el progresivo retorno a la presencialidad?
Por la experiencia que he tenido, puedo decir que la gente está feliz de volver al teatro. También hay mucha gente que está yendo por primera vez, después de haber estado tanto tiempo en casa viendo obras virtuales o usando las plataformas de streaming. Además lo rico del teatro es que es en vivo.
¿A la virtualidad le falta algo?
Tuve la oportunidad de hacer muchísimas obras virtuales y de adaptarme a la cámara del celular. Al principio fue muy extraño y obviamente había problemas con los que teníamos que lidiar (zoom, la conexión a Internet y varios etc). Creo que lo rico del arte es que siempre se adapta, ese es el poder que tiene el arte: se adapta a la situación y continúa.
¿Llegó para quedarse?
Aunque yo no lo llamaría teatro, por eso digo obras virtuales. En “Fieras” estamos equipados para que la gente que todavía no se anima a disfrutar de un espectáculo en vivo pueda verlo y la gente que está en provincias también. Pero creo que la virtualidad ha llegado para quedarse, porque el arte no muere, se reinventa, se adapta y si hay que echar mano de la tecnología se hace. Es riquísimo seguir creando y tomando en cuenta las nuevas necesidades.
Bueno la pandemia aceleró el proceso de la digitalización…
La pandemia nos puso en una situación en la que la gente tuvo que decidir qué hacer, si continuar con lo suyo o reinventarse, renovarse o cambiar. En el caso de los artistas, nos hemos reinventado y, gracias a Dios, he continuado actuando y conectada con el público. Todos la hemos pasado difícil al inicio, pero creo que si uno no pierde la esperanza en los tiempos difíciles, la vida misma te va abriendo caminos, te va dando oportunidades a pesar que uno piense que no.
¿En algún momento perdiste la esperanza?
¡Nunca! En ese aspecto soy una fiera. Me puse a escribir, a producir, hice mis propias obras pero el arte nunca muere. Si uno es arte -y yo soy una artista- siempre hay algo que decir. Si te toca la virtualidad, pues a la virtualidad, pero ahí estás haciendo arte.