“La reacción de la gente en la calle, es linda, porque si bien habla mal de mi personaje, habla bien de mi trabajo. Creo que Enzo no es tan malo, porque quiere a sus hijos, lucha por el amor de su pareja, pero, a pesar que sus intenciones son buenas, los modos no son los mejores”, dice Fernando Niño, el actor argentino que da vida al polémico Enzo Messina en la telenovela “Perdóname”, que él considera una oportunidad invalorable para seguir ampliando sus horizontes artísticos.
Siempre dicen que los villanos la pasan mejor en las telenovelas... Me parece que sí, yo veo al “Chino” Miyashiro que está sufriendo mucho y su personaje llora, el mío tampoco es el más divertido, hace maldades, mata gente, pero tiene otras aristas.
¿Cómo llega a tus manos el personaje de Enzo en ‘Perdóname’? Yo trabajé en Buenos Aires, en el verano de este año en una obra de teatro que se llamó FACA, que fue la versión de “Misterio” de Aldo Miyashiro. Él la llevó a la Argentina y yo fui parte del elenco, allí lo conocí y cuando terminó la temporada, en abril me llama desde Lima y me comenta e que había un personaje en una telenovela que era argentino y que había pensado en mí. Fuimos charlando, mandé unas audiciones vía Internet para que me pueda conocer Michelle y la gente de su producción, y bueno.. aquí estoy.
¿Te sorprendió la elección, es la primera vez que salías a trabajar fuera de tu país? Yo había venido a Perú hace unos nueve años, vine a hacer un comercial por dos días y me quedé con la impresión bastante fugaz de lo que era trabajar acá. Ahora la verdad, estoy enamorado de Lima, estoy enamorado de mi trabajo, estoy enamorado de ustedes, son personas muy amorosas, me tratan muy bien, la comida, la cultura, todo, y por sobre todo el profesionalismo.
Los melodramas gozan de muy buena salud
La verdad no sabía de la importancia de las telenovelas en Perú, no sabía que las producían. En Argentina la telenovela está en recesión. Aquí en el Perú veo que la tele tiene todavía mucha importancia en las familias, la persona llega de su trabajo a su casa y quiere ver la tele y ver la novela; eso me parece fascinante para nuestro trabajo, es hermoso.
Usualmente a los actores no les gusta juzgar a los personajes que interpretan , ¿te atreves? Sí, es un poco la ley del actor no juzgar a sus personajes, trato de buscar la humanidad de cada personaje y justificar todas sus acciones, porque más que sean injustificables. Me parece más atractivo, y más funcional, decir por qué esta persona está haciendo esto, porque está perdidamente enamorado de la esposa y de los hijos, porque tiene objetivos, porque no quiere quedarse en la calle,¿
¿La actuación siempre fue para ti una apuesta de vida, cómo lo fuiste descubriendo? A mí siempre me llamó la atención desde siempre el mundo de la tele, de las luces, del teatro, desde chico miraba series juveniles, pero en mi cabeza siempre estaba el deseo de ser jugador de fútbol. A mí siempre me gustó el fútbol, pero bueno, eso se me pinchó rápido, porque si a los 15, 16, 17, años ya no estás jugando en un club, ya se entiende que no vas a poder ser. Cuando terminé la secundaria, me anoté en un taller de teatro a los 17 años, y en la primera muestra hicimos una obra con mis compañeros, al que asistieron familiares y amigos. Cuando el público aplaudió, recuerdo haber pensado esto lo quiero para toda mi vida, de que acá no me voy a mover.
A pesar de lo que se dice del mundo artístico, no hay como hacer en la vida lo que a uno le gusta. No hay nada como eso, y de hecho te diría que en el mundo artístico son más las épocas de vacas flacas que de vacas gordas, pero te juro que todo vale la pena. No hay nada más gratificante que hacer lo que uno quiere, lo que uno ama, y por el contrario no hay nada peor de ver cómo pasan tus horas en un lugar donde no estás siendo feliz, me parece eso el castigo más grande.
¿Te veremos haciendo maldades por un buen tiempo o los guionistas de la telenovela te convertirán en bueno? Que me vuelva bueno, ya no lo creo, no creo que pegue la vuelta, pero Enzo seguirá estando para unos capítulos más, entiendo que la novela tiene para rato y que mi personaje va a andar por ahí también.