Al momento de buscar prendas con textura suave y brillo, muchos eligen el satén para lucirlo en vestidos o pijamas; sin embargo, este tejido delicado no siempre se lava de manera correcta, lo que ocasiona que pierdan su aspecto o se deshilachen por el constante uso. Si quieres que te duren por más tiempo, estos trucos caseros te ayudarán a limpiar y planchar tus prendas de acabado satinado sin que se dañen o quemen.
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Si en tu clóset hay camisas, faldas, vestidos, pijamas o sábanas de satén o raso es necesario que dejes de lado la lavadora y aprendas a lavarlas a mano, con agua fría o tibia y un detergente para prendas delicadas.
Trucos caseros para lavar prendas de satén
- En una batea o balde vierte una buena cantidad de agua fría o tibia. Nunca debe estar caliente.
- Vierte una dosis de detergente para tejidos delicadas.
- Lava la prenda siempre al revés.
- Si tiene alguna mancha puedes usar vinagre blanco para removerla, nunca uses lejía y frotar con mucha suavidad.
- Para enjuagar la prenda también hay que usar agua fría.
- Lo más recomendable es no escurrirla o retorcerla, lo mejor es colocarla en una percha y colgarla en el tendedero para que se quite el exceso de agua. Evita que le dé directamente el sol y no uses secadora, pues al ser delgadas secarán muy rápido.
Cómo planchar el satén
- A la hora de planchar hay que hacerlo a temperatura muy baja y poniendo la prenda bajo un pañuelo antes de pasar la plancha. También puede ser una tela que resista el calor como una toalla delgada, así esta absorbe un poco del calor y no se decolora nuestro satén, tal como sugieren desde Univision.
- Comienza a planchar cuando la prenda esté seca en su totalidad y hacer al revés.
¿Qué es el satén y cómo cuidarlo?
El satén es un tejido de algodón caracterizado por un elegante brillo exterior y una buena consistencia. El satén consigue su tacto liso y brillante gracias a los hilvanes largos que forman los hilos de la trama en su parte derecha. Una cara del tejido suele ser más mate que la otra.
Entre los consejos para cuidarlo y que dure por más tiempo destacan el nunca utilizar agua caliente, prohibido meter las prendas en la secadora, evitar utilizar productos de lavado agresivos y dejar la ropa secar alejarla de la luz directa del sol.