El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, aseguró hoy que su mayor remordimiento al dejar el cargo a final de este año será la continuación de la “pesadilla en Siria”.
En un acto en el Consejo de Seguridad, Ban reiteró a los quince miembros su llamamiento a que “cooperen y cumplan con su responsabilidad colectiva de proteger a los civiles sirios”.
“El Consejo es fuerte cuando está unido”, recalcó el diplomático coreano, que dijo que cuando falta unidad las consecuencias pueden ser “profundas”, como en el caso del Sáhara Occidental, e “incluso catastróficas”, como en Sudán del Sur.
“Sin embargo, mi mayor remordimiento al dejar el cargo es la continuación de la pesadilla en Siria”, admitió.
El jefe de Naciones Unidas, que termina su mandato el 31 de diciembre, destacó que durante sus diez años al frente de la organización ha sido testigo de la capacidad del Consejo de Seguridad para actuar de forma innovadora y responder a situaciones complejas.
Como ejemplos, destacó los mandatos de varias operaciones de paz, la cooperación con organizaciones como la Unión Africana o el trabajo en el área de Mujer, Paz y Seguridad.
De cara al futuro, Ban animó al máximo órgano de decisión de la ONU a seguir trabajando en la reacción temprana ante crisis y en la prevención de conflicto, con una mayor atención a los derechos humanos y más participación de la sociedad civil.
En la sesión, el Consejo de Seguridad rindió tributo al trabajo del veterano diplomático, de 72 años, al que a partir del 1 de enero sucederá el portugués António Guterres.
“Hoy rendimos homenaje a la perseverancia, dedicación y flexibilidad con que ha ejercido sus funciones y a su incansable voluntad de servir a 'nosotros los pueblos' por encima de cualquier otra consideración, tal y como se comprometió al prestar juramento hace ahora 10 años”, dijo el presidente del Consejo de Seguridad, el español Román Oyarzun, en nombre de todos los miembros.
Oyarzun destacó los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el acuerdo sobre el clima de París como los “grandes éxitos” del legado de Ban y apuntó que ambos son fruto de “sus aptitudes negociadoras y de su destreza diplomática”.
El embajador español, que preside el Consejo a lo largo de diciembre, destacó además que el secretario general ha hecho suya la causa de los derechos humanos, “abogando por sociedades más justas e igualitarias” y recordó que bajo su liderazgo se creó el Consejo de Derechos Humanos, se estableció ONU Mujeres y se designó al primer enviado especial para la Juventud.
“Gracias a usted, señor secretario general, los más vulnerables o marginalizados se han sentido más escuchados y atendidos por las Naciones Unidas”, le dijo.
Los quince miembros del Consejo de Seguridad aprobaron por aclamación una breve resolución en la que reconocen de forma oficial la contribución de Ban “a la paz, la seguridad y el desarrollo internacionales” y le expresan su agradecimiento.
Rompiendo con la tradición de no aplaudir en la sala del Consejo, los embajadores dedicaron al secretario general una prolongada ovación de despedida.
Hoy, además, el diplomático coreano desveló un retrato suyo, que ya luce junto a los de los anteriores secretarios generales en la sede de Naciones Unidas. EFE