La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, anunció la ampliación del programa social Brasil Cariñoso para las familias pobres que tengan entre sus hijos al menos un menor de hasta 15 años de edad.
Se trata de un decisivo paso hacia la construcción de una sociedad de clase media, una fuerte iniciativa para acabar con la pobreza, resaltó Rousseff en un acto realizado en la sede de la Presidencia.
“He dicho que queremos construir un país de clase media”, y por eso, una de nuestras prioridades desde el inicio del Gobierno es el retiro de 16 millones de brasileños de la pobreza“, subrayó la mandataria, según Prensa Latina.
Recordó que “Brasil Cariñoso”, lanzado en 2012, estaba orientado para atender a familias con niños de hasta seis años, pero ahora los beneficios se extienden hasta los 15 años.
Según datos oficiales, 18 millones de personas se favorecerán de este programa, el cual se ampliará hasta alcanzar los 25 millones de ciudadanos.
Desde la implementación de este plan, el gobierno federal retiró de la miseria extrema a 9,1 millones de habitantes, entre ellos 2,8 millones de niños, y con su expansión, se espera que más de 7,3 millones de personas salgan de la pobreza.
Las familias inscritas en Brasil Cariñoso reciben un aporte de 70 reales (unos 35 dólares) al mes.