Steve Bannon, comunicador político, exbanquero y figura esencial dentro de la campaña que llevó a Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos en el 2016, fue censurado por las plataformas de Twitter y Youtube acusado de incentivar a la violencia a través de su programa online War Room Pandemic.
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“Pondría sus cabezas en lanzas en dos esquinas de la Casa Blanca como advertencia a los burócratas federales”, expresó durante una transmisión en vivo quien en algún momento fue un cercano consejero del mandatario.
De inmediato, los usuarios de las redes sociales denunciaron que Bannon estaba difundiendo mensajes que invitaban a la violencia y que hablaban sobre conspiraciones respecto a un fraude electoral durante los comicios en Estados Unidos.
El ejecutivo de extrema derecha, a quien Trump considera su amigo y colega, pidió la decapitación del jefe del FBI Christopher Wray y del director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas Anthony Fauci.
Por ello, Twitter suspendió la cuenta @WarRoomPandemic "de forma permanente por haber infringido las reglas de Twitter, especialmente nuestra política relativa a la glorificación de la violencia”, según detallaron en un comunicado.
YouTube hizo lo propio con el episodio que incluía las declaraciones, aunque el canal sigue activo y cuenta con más de 200 mil sunoscriptores este no podrá subir contenido durante al menos una semana, de acuerdo a la plataforma.
“Continuaremos siendo vigilantes en la implementación de nuestras políticas durante el período postelectoral”, dijo Alex Joseph, portavoz de YouTube según la agencia AFP.
Este hombre de 66 años y mirada imponente fue consejero de Trump hasta 2017, cuando la Casa Blanca comunicó su cese en las funciones. Según The Indian Express, Bannon fue el tercer funcionario en ser despedido junto con el jefe de gabinete Reince Priebus, y el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer.
Además, es exeditor de Breitbart News, una página web creada en 2017 donde se emiten opiniones políticas. Bannon la llamaba “una plataforma para la derecha alternativa”. Según información de la BBC, los críticos lo culparon de promover ideas antisemitas y de supremacía blanca en dicho portal.
En 2016 fue uno de los acompañantes de Trump durante la campaña electoral, un logro que queda opacado por cargos de fraude y blanqueo de dinero, por los mismo que se declaró como “no culpable” ante los tribunales.
El exasesor habría desviado fondos de las donaciones realizadas a la campaña que prometía construir el tan mentado muro antinmigrante en la frontera con México. Según la fiscalía, el monto recaudado era mayor a 20 millones de dólares. Tras pagar una fianza de 5 millones de dólares, Bannon salió en libertad.
Después de dejar la política al lado del mandatario republicano, Bannon y Trump se distanciaron. Según medios locales, la publicación del libro “Fuego y furia: En las entrañas de la Casa Blanca de Trump” tuvo cierta injerencia en el distanciamiento entre el presidente y su exasesor.
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