Un hombre que reivindicó su pertenencia al grupo Estado Islámico asesinó en Francia en plena Eurocopa de fútbol a un policía y a su compañera, un acto calificado por el presidente francés François Holande de “terrorista”.
Hollande habló este martes de “incontestable acción terrorista” al referirse al doble asesinato, cometido el lunes por la noche en el domicilio de las víctimas al noroeste de París.
“Francia se enfrenta a una amenaza terrorista de gran importancia”, advirtió el mandatario.
Este atentado se produce dos días después de la matanza de Orlando (sudeste de Estados Unidos), reivindicada por el EI, que causó 49 muertos y 53 heridos en un club gay, y en plena Eurocopa de fútbol organizada en Francia siete meses después de los atentados de noviembre en París (130 muertos), igualmente cometidos por este grupo yihadista.
El agresor, abatido por la policía de élite, tenía 25 años, se llamaba Larossi Abballa y había sido condenado en 2013 a tres años por integrar una red yihadista con vistas “a preparar actos terroristas”. La red, que tenía vínculos en Francia y Pakistán, favorecía el reclutamiento, la formación física e ideológica y el envío a Pakistán de jóvenes voluntarios para la yihad armada, indicaron el martes fuentes cercanas a la investigación.
Fichado por radicalización, Abballa estaba también implicado en una reciente investigación sobre una red yihadista siria, según esas fuentes.
Dos personas, consideradas “relaciones” de Abballa, permanecían detenidas el martes por la mañana, según una fuente policial.
Hacia las 21H00 del lunes (19H00 GMT), Abballa mató a cuchilladas a un policía de 42 años vestido de civil en un barrio residencial de Magnanville, al oeste deParís.
Varios testigos afirmaron que gritó Allahu Akbar (Dios es grande) en el momento de la agresión.
Larossi Abballa se atrincheró luego en el domicilio de la víctima, que fue rodeado rápidamente por fuerzas policiales de élite. Tras infructuosas negociaciones las fuerzas de seguridad lanzaron un asalto durante el cual murió el atacante.
“Al entrar, las fuerzas del orden (...) encontraron el cuerpo de una mujer” y “el atacante fue abatido”, señaló el fiscal de Versalles.
La mujer, pareja del policía asesinado, trabajada como secretaria en la comisaría de Mantes-la-Jolie, al oeste de la capital.
Los agentes rescataron a un niño de tres años, hijo de la pareja, “conmocionado pero ileso”, que luego fue atendido por los equipos médicos.
GRABÓ VIDEO DEL ASESINATO
El periodista David Thomson, corresponsal para RFI (Radio Francia Internacional) en Túnez y Libia, reportó en su cuenta de Twitter que Abballa grabó un video durante el ataque y lo compartió en Facebook Live, junto con fotos de sus víctimas .
El periodista que tuvo acceso a la filmación de al menos 13 minutos de duración, antes de que la cuenta del terrorista fuera suspendida por las autoridades,comentó las imágenes en un serie de tuits:
“El bebé está detrás de él, en el sofá”, relata Thomson. “No sé todavía que voy a hacer con él”, dice el asesino citado por el periodista, después de matar a los padres del chico. Éste fue finalmente rescatado, conmocionado pero ileso, y atendido por los equipos médicos.
COMBATIENTE DEL ESTADO ISLÁMICO
Poco después de conocerse el doble asesinato, la agencia Amaq, vinculada al Estado Islámico, anunció que “un combatiente del Estado Islámico” mató a un policía y a su pareja cerca de París, según el centro estadounidense de vigilancia de portales yihadistas SITE.
Fuentes policiales habían indicado antes del comunicado de Amaq, que Larossi Abballa había reivindicado su pertenencia al EI durante las negociaciones con la policía.
La sección antiterrorista de la fiscalía de París se hizo cargo de la investigación.
El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, se reunió con los colegas “traumatizados” de las dos víctimas y prometió la detención de “eventuales cómplices”.
El presidente francés convocó el martes por la mañana a una reunión de los ministros del Interior, Defensa y Justicia, en el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia.
El primer ministro Manuel Valls expresó por su parte “la solidaridad de toda la nación con los policías” y exhortó a “rechazar el miedo, a combatir el terrorismo” en un mensaje difundido en Twitter.
El atentado fue condenado con “firmeza” por el ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.
Siete policías han perdido la vida en los últimos cuatro años en Francia en atentados islamistas, pero es la primera vez que uno de ellos es atacado en su domicilio, con un miembro de su familia.
Desde los atentados de noviembre en París, Francia vive en un clima de amenaza terrorista y ha adoptado importantes dispositivos de seguridad militar y policial.
El 24 de noviembre de 2015, el servicio de prensa del Estado Islámico en la provincia siria de Raqa difundió un video en el que combatientes francófonos del EI amenazaban a los franceses con nuevos ataques contra sus “casas”.