El papa Francisco ha convocado en el Vaticano a un sínodo o asamblea extraordinaria de obispos, la cual tendrá lugar del 5 al 19 de octubre.
En dicha reunión se tratarán diversos temas que afectan a la familia del siglo XXI y que son materia de discusión en varios países del globo.
Entre ellos se encuentran los siguientes:
- El divorcio: No se excluye que la jerarquía de la Iglesia decida facilitar los procesos para la anulación de los matrimonios o que se readmita la eucaristía para los divorciados vueltos a casar por civil después de que cumplan un período “penitencial”.
- La prohibición de dar la comunión a los divorciados que se vuelven a casar: Un asunto que suscita un complejo debate de carácter teológico, casi inexplicable para una parte de los creyentes, que no entienden las razones por las que no se puede acceder a la comunión ni a que se les bendiga en caso de una segunda unión.
- La homosexualidad: Sectores católicos apoyan un cambio de actitud pastoral hacia los homosexuales, “de acogida”, como dijo el papa argentino, suscitando todo tipo de reacciones, si bien no aprueba el matrimonio gay ni la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo.
- Las uniones libres y del mismo sexo.
- El aborto: La iglesia considera el matrimonio y la familia como el eje central de la sociedad, y por ello condena el aborto, si bien ha sido legalizado en numerosos países.
- La contracepción: La condena todo tipo de método que no sea natural, es otro tema urgente, ya que la mayoría de los católicos de los países industrializados recurre a la píldora sin respetar ese precepto.