Rusia, que ha acusado a Ucrania de preparar atentados terroristas en la península de Crimea, advirtió hoy a Kiev y a sus aliados occidentales de que el Gobierno ucraniano debe evitar dar pasos peligrosos porque “jugar con fuego no acaba bien”.
“Una vez más, hacemos un llamamiento a nuestros socios (occidentales) para que ejerzan su influencia sobre las autoridades de Kiev y les prevengan de pasos peligrosos que pueden tener consecuencias de lo más negativo. Jugar con fuego no acaba bien”, señala un comunicado difundido por el Ministerio ruso de Exteriores.
El Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, antiguo KGB) denunció ayer que grupos de la inteligencia militar ucraniana intentaron infiltrarse en Crimea en dos operaciones de sabotaje -una en la madrugada del 7 de agosto y otra el día 8- con el objetivo de atentar contra “infraestructuras vitales de la península”.
Las muertes de un agente del FSB y de un militar ruso durante los enfrentamientos entre las fuerzas rusas y los saboteadores ucranianos, durante esos incidentes denunciados por Moscú y negados por Kiev, “no quedarán impunes”, asegura el departamento de Exteriores.
El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ordenó hoy poner en “máxima alerta de combate” a todas las tropas ucranianas desplegadas en la frontera con Crimea y en la línea de separación de fuerzas con los rebeldes prorrusos en el este del país.
El mandatario ruso, Vladímir Putin, acusó ayer de terrorismo al Gobierno ucraniano y alertó de que Rusia no dejará “pasar estas cosas”.
Petró Poroshenko respondió tachando de “cínicas” las acusaciones rusas y afirmó que se trata de “fantasías que (los rusos) usan como pretexto para lanzar nuevas amenazas militares a Ucrania”.
Ucrania abrió hoy por orden de Petró Poroshenko consultas para debatir en el Consejo de Seguridad de la ONU “en relación con la provocación del Kremlin en Crimea”.
Vladimir Putin se reunió hoy con miembros del Consejo de Seguridad de Rusia para debatir medidas adicionales dirigidas a reforzar la defensa de Crimea, anexionada por Rusia en marzo de 2014.
Puede leer:
Ucrania incrementa su presencia militar en la frontera con Crimea