Rusia confirmó este martes que la caída de un avión ruso en el Sinaí egipcio el 31 de octubre fue provocada por una bomba, prometió “castigar” a los responsables y anunció además que intensificará los bombardeos en Siria.
“Podemos decir que se trata de un atentado”, dijo el jefe de los servicios secretos rusos (FSB), Alexandre Bortnikov, al presidente ruso Vladimir Putin durante una reunión de madrugada en el Kremlin.
“Durante el vuelo, se activó un artefacto explosivo artesanal de una potencia equivalente a 1 kilo de TNT”, según el jefe del FSB. “En consecuencia, el avión se desintegró en el aire, lo que explica por qué había partes del fuselaje en un radio muy amplio”, añadió.
El atentado, en el que murieron 224 personas, fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI). Hasta este martes Rusia había puesto en duda la tesis del atentado, que sí apoyaban Estados Unidos y Reino Unido. Aún así las autoridades de Moscú decidieron suspender los vuelos a Egipto.
Por su parte el presidente Vladimir Putin prometió encontrar a los culpables.
“No vamos a secar nuestras lágrimas. Esto nos marcará para siempre. Pero esto no nos impedirá encontrar y castigar a los criminales”, dijo Putin. “Tenemos que hacerlo rápido, identificarlos (...) Vamos a encontrarlos en cualquier lugar del planeta y les castigaremos”, afirmó.
“La acción militar de nuestra aviación en Siria no sólo tiene que continuar sino que hay que intensificarla para que los criminales se den cuenta de que el castigo es inevitable”, afirmó.
El accidente del Airbus A321 de la compañía rusa Metrojet que iba de Sharm el Sheij, una localidad muy turística de la península egipcia del Sinaí, en dirección a San Peterbusrgo, es la peor catástrofe aérea de la historia del país y el peor atentado contra rusos en los últimos diez años.
El anuncio del Kremlin se produce cuatro días después de los atentados de París, también reivindicados por el EI, que dejaron 129 muertos y más de 300 heridos.
El lunes, cuando participaba en la cumbre del G20 en Antalya, en Turquía, el presidente ruso pidió “unir esfuerzos en la lucha contra el mal, contra el terrorismo”.
Según Putin los atentados recientes demuestran que Rusia hizo bien en querer organizar una coalición internacional en Siria, donde los rusos ya están llevando ataques aéreos casi a diario des finales de septiembre a petición del régimen del presidente Bashar Al Asad.