El ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, parece tener abundantes ganas de destrabar millonarios proyectos mineros que pese a cumplir las exigencias del Estado, no puede salir adelante. Sin embargo, esto debe ir acompañado de la voluntad política de un gobierno que no define su postura respecto a la inversión privada, salvo algunos discursos que luego no son respaldados por las acciones.
Lo cierto es que el país necesita inversión para generar empleo y recaudar tributos a fin de atender sectores como Salud y Educación que siguen siendo la última rueda del coche en un país donde no se puede hacer frente al previsible dengue y las aulas de las escuelas públicas se caen a pedazos a pocos días del inicio del año escolar.
No olvidemos las necesidades en materia de seguridad ciudadana. Nos faltan policías y las comisarías son una pena al no ofrecer las mínimas comodidades a los agentes.
La llegada del ministro Mucho al MEF es una excelente señal al relevar al sindicalista Óscar Vera. Sin embargo, si no hay apoyo, sus buenas intenciones quedarán en eso. Lo señalamos porque hasta ahora el gobierno de Dina Boluarte no se compra, con acciones decisivas, una apuesta por la inversión y el destrabe de proyectos, que es lo que necesita un país como el nuestro con una economía que bordea el rojo.