Durante algunas semanas lo tuvieron controlado y evitaron que hable para que no ponga más lastres al barco a punto de hundirse, por ayer ha vuelto por “todo lo alto” el premier Aníbal Torres para acusar a los medios, a la fiscalía y a “la ultraderecha” de la precaria situación judicial de su jefe, el presidente Pedro Castillo, a quien nadie obligó a rodearse de impresentables como Zamir Villaverde, Bruno Pacheco o Juan Silva, el primero de ellos preso y los otros prófugos.
Ayer, en su ya acostumbrado discurso político propio de los mal llamados consejos de ministros descentralizados, esta vez desde Arequipa, a donde también llegó el presidente Castillo, el premier Torres dijo que el mandatario está dispuesto a colaborar con la justicia, pero que hay medios, especialmente de Lima, que buscan “torcer los hechos”. De igual forma cuestionó al Ministerio Público por “administrar justicia en base a la mentira, la falsedad”.
Alguien debería decirle al premier Torres, famoso por decir que un día iba por la calle y se encontró con Bruno Pacheco, al que llamó a su auto para conversar sobre los 20 mil dólares que le encontraron en un baño de Palacio de Gobierno, que el único responsable de tener a la Fiscalía de la Nación respirándole en la oreja es el propio profesor Castillo, el que nombró a Silva como ministro y lo mantuvo por razones nada santas que pronto conoceremos.
En lugar de quejarse, el premier Torres debería estar agradecido por el hecho de que el presidente Castillo siga en el cargo a pesar de todo lo que se ha ido conociendo. En cualquier otro país o en el Perú mismo, pero en otro momento, por la mitad de lo que sabemos el actual mandatario ya tendría que estar fuera del cargo y a punto de entrar al penal Barbadillo. Esto en gran parte es responsabilidad de la izquierda, que lo sigue sosteniendo en medio de la incapacidad y corrupción del régimen.
Culpar hoy a los medios, a “la ultraderecha” o a la fiscalía por la crisis en la que se encuentra el presidente, ya parece una broma de mal gusto o un meme con Torres como protagonista, como cuando pidió a los peruanos que coman pescado en lugar de pollo porque había subido de precio, o ahora que sale a decir que como se ha incrementado el precio del gas licuado de petróleo (GLP), conviertan sus vehículos para que circulen con gas natural vehicular (GNV). ¿De dónde sacaron a este señor?