La polémica por la fiesta “Sexy Halloween” en la Costa Verde aún continúa. El alcalde de Magdalena, Francis Allison, asumió la responsabilidad por lo ocurrido tras la realización del evento que no contaba con la autorización de la Onagi.

El burgomaestre explicó que se enteró en la madrugada, y por intermedio de la prensa que la celebración se estaba realizando, pese aunque había ordenado la clausura del evento.

Explicó que los funcionarios que se hicieron presentes en el lugar donde se realizó el concierto, no le comunicaron que los organizadores desacataron su orden e hicieron ingresar por la fuerza por público.

En ese sentido, detalló que tres funcionarios han sido sancionados por no haber estado al “nivel del problema”. Se trata de los gerentes de Seguridad Ciudadana, Luis Praeli, el de Fiscalización, Jesús Salazar, y se le suma el gerente general de Magdalena.

“Yo me entero por la prensa en horas de la madrugada. Por los canales de televisión vi lo que estaba sucediendo y eso es inaceptable para mí, como alcalde”, manifestó en entrevista con Exitosa, donde también anunció que no habrá más conciertos en la zona de la Costa Verde, que se encuentra en su jurisdicción. 

Allison reiteró acciones legales contra los organizadores de la fiesta, por desobedicencia a la autoridad y por poner en riesgo la integridad del público. 

EXGERENTE SE DEFIENDE

El ex gerente de Fiscalización, se defendió aduciendo que no tuvo el apoyo suficiente para controlar el ingreso de miles de asistentes. Además, negó haber recibido ningún tipo de coima para permitir que el evento se realice. 

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