El campo de una parcela se convirtió de pronto en el escenario de una descomunal bronca protagonizada entre hermanos, luego que los integrantes de una misma familia se liaran a golpes por la disputa de una zona arrocera de más de 4 hectáreas, ubicado en el sector La Jota del distrito de Corrales.El feroz enfrentamiento que incluyó palos entre otros objetos contundentes se produjo al promediar las 7:30 de la mañana en la zona agrícola conocida como “Lourdes”, viéndose involucrados Eliseo Ancajima Anastacio (45) quien al parecer con el apoyo de un hijo suyo entre otros familiares se enfrascaron en un salvaje pleito contra sus parientes Eddy y Antonio Ancajima Anastacio (38), los mismos que resultaron lastimados con diversas contusiones en el rostro.Estos últimos señalaron haber denunciado a su hermano ante la Policía por los hechos suscitados y por la violenta actitud que vendría mostrando contra los demás integrantes de la familia, al oponerse que la siembra de arroz sea cosechada de acuerdo a como les fue heredado por su fallecido padre, el terreno agrícola actualmente en disputa.“Él (Eliseo) se opone a la cosecha que ya deseamos realizar, aduciendo que la chacra no debe repartirse entre 10 hermanos que somos, sino sólo entre 7, lo cual estamos en desacuerdo puesto que la inversión la ha hecho todo el grupo familiar, a pesar que él nunca ha colaborado con nosotros como ha debido ser”, destacó Félix Ancajima Anastacio (43), también hermano del agricultor denunciado.SE DEFIENDE. Por su parte, el pariente quejado, indicó a Correo que denunciará a su familiar Antonio Ancajima a quien lo acusó de haber contratado gente particular para intentar atacarlo en la mañana de ayer. “Me dijeron tú eres el que no deja cosechar y que me iban a matar por ello. (..) Si yo no estoy herido es porque me he defendido y he corrido de ellos”, argumentó Eliseo.Agregó que sus allegados no le quieren reconocer la propiedad de una parte del terreno que de acuerdo a la herencia le pertenecería legalmente; asimismo, reconoció que este problema surgió a raíz de que en enero del presente año el resto de su familia le tumbó un lindero que demarcaba su área, trabajo del cual le demandó mil 200 soles para poder ejecutarlo. “Soy hermano de ellos, pero me duele mucho que en las tres campañas anteriores no me hayan dado ningún sol de las anteriores cosechas. Me acusan de ladrón y de delincuente y eso me duele mucho”, destacó.Los hermanos lastimados destacaron su preocupación contra las autoridades, toda vez que señalaron no haber sido atendidos ante tan álgido problema. “Vamos a la justicia para que intervengan y no nos atienden, que esperan que ocurra”, sentenció Antonio Ancajima.Eliseo Ancajima propuso como salida que se coseche la siembra de arroz y que sea llevada a un molino, hasta que el Poder Judicial decida como se reparte la producción. No obstante, ello no tuvo el respaldo de sus demás parientes.