Grave problema. Si su niño para cansado, con sueño, no tiene concentración, escribe incoherencias, preocúpese, puede que sea una de las víctimas de la anemia. Este mal no perceptible por los padres, se encuentra en incremento en la región y cada vez son más los que la padecen.
cifras. Según reportes de la Diresa JUNÍN al 2014, la anemia registró un 64% de prevalencia en niños menores de tres años. Esto ubica a la región en segundo lugar a nivel nacional, después de Puno. Las zonas rurales son los que tienen más casos con 57.5% respecto al 42.3% de la rural. En cuanto a los niveles socioeconómicos, se reporta que el 57% son del quintil uno (extrema pobreza).
Además se resalta que exista un 26% del tercer quintil (media alta), que según el coordinador regional de la Estrategia Materno-Neonatal de la Diresa, Norberto Yumanaque, es porque las mujeres que trabajan descuidan a sus hijos. La anemia es un paso antes que la desnutrición y las secuelas que originan como en el cerebro y el daño orgánico en los niños es irreversible, dijo el especialista.
Para contrarrestar este problema se distribuye gratuitamente sobres de micronutrientes