Guillermo Rivas: “tengo dos pasiones: leer y promocionar la lectura”

Leer de por sí genera una sensación de llenura, pero si es acompañado de un lugar acogedor, hace que ese momento sea fascinante. La primera librería boutique en el Perú, Books & Co., tiene esta intención. No solo la de ofrecer libros, sino también la de asesorar al lector durante su compra. Con dos tiendas disponibles en Lima, una ubicada en La Molina y la otra en Surco, en casi menos de un año ha sabido ganarse al público peruano cuidando los detalles y ofreciendo un concepto distinto. Aunque Guillermo Rivas, socio-gerente de esta compañía, asegura que económicamente el sector editorial no es uno de los negocios más rentables, su pasión por la lectura y su fomento es lo que le impulsa a seguir.

¿Cómo nace la idea de hacer una nueva librería en Perú con la intención de brindar una nueva experiencia al lector? 

Esto lleva muchos años, con mi socio tenemos muchos años viviendo en Perú y siempre hemos estado relacionados con el libro y la promoción del mismo. Y teníamos esa sensación de que al Perú le faltaba un estilo de librería diferente y, por supuesto, muchas más librerías, porque son muy pocas las que tenemos para 33 millones de habitantes y para esta clase media emergente, que cada vez tiene un consumo cultural mayor. Y con esta idea creamos una librería que esté pensada más desde el punto de vista del lector que del libro. Conocíamos librerías que estaban especializadas en algún tema, pero no que estén pensadas en el lector.

Mencionemos esos puntos que hacen que el lector se sienta cómodo... 

Primero que todo, el diseño de la librería, porque tratamos que tenga buena iluminación, muebles blancos, espacios muy alumbrados, pero sobre todo ofrecemos una curaduría con un extenso catálogo de todos los libros que en otras partes no hay. Además, nuestro equipo de trabajo está preparado para ayudar al lector a encontrar ese libro que está buscando.

Según su experiencia en el sector literario, ¿cuáles son los lectores que más frecuentan la librería? 

En primer lugar son las mujeres, en edades entre los 18 y 35 años, una edad promedio. Las féminas evidentemente son más lectoras, porque son las más preocupadas de que los niños lean, por sus hijos y por la formación educativa, además porque el libro se ha convertido en un objeto de regalo. No solo porque hay un entretenimiento en la lectura, sino porque realmente tenemos libros que son un objeto, en su diseño, fotografía, en su ilustración. Por eso es que son más las mujeres que adquieren un libro como regalo. En segundo lugar son los niños, aquellos que tienen más independencia, los que ya leen. Ellos entran solos y de inmediato buscan su libro preferido porque parece ser que ya tienen su selección previamente. Entre esos dos públicos está la mayoría, tenemos que animar al resto.

¿Cuáles son los géneros más solicitados? 

El género infantil es el más solicitado, luego hay una cierta tendencia con los libros que tienen que ver con el desarrollo de las personas. Después definitivamente la novela, porque tiene mucha aceptación.

Sobre la última encuesta, de qué tanto leen los peruanos, el 35% afirmó que leer es una tarea difícil. A pesar de esto, ¿cree usted que tener una librería genera rentabilidad en el Perú? 

Esa sensación de que leer es una tarea difícil está muy instalada y muchos de nosotros tenemos la culpa. Los que estamos metidos en el mundo editorial y de la lectura a veces transmitimos que leer es algo complejo. Tenemos que demostrar que hay lectura para todos, a veces lo difícil es encontrar el tiempo. Yo sí creo que hay un libro para cada persona. Además, leer es uno de los entretenimientos más económicos que hay porque ese mismo ejemplar se puede pasar a otra persona. Con el tema de las ganancias, que no es un negocio netamente rentable, no hay grandes márgenes por el tema de la imprenta, por el tema de los locales que es bastante alto. Todo eso hace que un buen negocio de libros esté rondando en un 8% o 10% de ganancias. Nosotros hemos tenido la suerte de encontrar el punto de equilibrio.

Y tomando en cuenta este resultado económico, ¿qué es lo que le impulsa a seguir en este rubro? 

Para mí hay dos pasiones: leer y la promoción de la lectura. Ver gente que encuentra una felicidad en la lectura es algo muy bonito, por eso yo casi reparto mi tiempo entre leer y hacer que otros lean. Me encanta atender en la librería, poder recomendar un libro, decirle a la gente que se lo lleve y que si no le gusta, que me lo traigan y me lo devuelvan. Lo que tenemos todo el equipo es una gran pasión por la lectura.

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