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El Centro Histórico de Lima se convirtió ayer en el vórtice de una convulsión local, pero también internacional.
En el Palacio de Torre Tagle, 17 cancilleres de países miembros de la OEA evaluaron acciones contra la dictadura venezolana. Afuera, en las arterias cercanas, unos 3 mil profesores de varias provincias del país -a los que se sumaron grupos de maestros de Lima y Callao- se enfrentaron a la policía antidisturbios.
Una barrera policial le impidió a este grupo de maestros acercarse a la sede del Congreso de la República.
Los huelguistas bloquearon las dos vías de la avenida Abancay durante varias horas.
Ello pese a que la ministra del sector, Marilú Martens, había advertido que esta misma semana empezarían las sanciones, descuentos y despidos a los docentes que no asistieran a clases.
De otro lado, el panorama en provincias no fue menos convulso. En al menos doce regiones, diversos comités de maestros prosiguieron con la medida de fuerza, que ya cumple 56 días en algunas provincias, pese a que el jueves pasado el Gobierno anunció un incremento a S/2 mil para la primera escala salarial desde diciembre.
Todo indica que la facción ultrarradical de docentes no se arredró con el recorte salarial que el Ministerio de Educación y los gobernadores regionales acordaron aplicar desde esta semana.
“¡Con sueldo o sin sueldo, la huelga continúa!”, gritaban ayer unos 2 mil maestros en el centro de Chiclayo.
DESDE MOQUEGUA. El mandatario Pedro Pablo Kuczynski tomó la decisión de invitar a los dirigentes a dialogar en Palacio de Gobierno con una única condición: que renuncien a las acciones de violencia.
El presidente Kuczynski cambió el curso de la huelga docente con la siguiente declaración desde Moquegua: “Estoy dispuesto a dialogar con los dirigentes, con una sola condición: que renuncien a cualquier intento de violencia, porque los profesores no pueden ser violentos, deben enseñarles a los chicos con tranquilidad”.
“Ya tenemos -continuó el Mandatario- los principales lineamientos de la solución económica. Ahora lo que necesitamos es una solución del corazón del Perú, que es un corazón que quiere la paz, no la violencia; que quiere el progreso, que quiere que estos chiquitos crezcan (…)”.
PPK manifestó su disposición a “resolver” el conflicto, pero precisó que hablará con los dirigentes que rechazan la violencia.
“Hay una huelga, pero nosotros la vamos a resolver. Queremos el diálogo, claro que rechazamos la violencia. Hablaremos con los delegados de los maestros que rechazan la violencia. Siempre estamos dispuestos a dialogar”, subrayó.
Una fuente de Palacio de Gobierno confirmó a Correo que hoy se definirá la hora exacta de la cita y que esta tendrá lugar la tarde del jueves.
Participarán, además del Presidente, el premier Fernando Zavala y la titular de Educación, Marilú Martens.
Pedro Castillo, dirigente de la facción de los comités de lucha regionales, expresó por la tarde que se hará presente en Palacio de Gobierno.
Pero antes de levantar la medida de fuerza, exigirán al Ejecutivo que se comprometa a concretar los acuerdos en un documento oficial que deberá ser publicado en el diario oficial El Peruano.
“Por supuesto. Somos los dirigentes legítimos de los maestros del Perú”, remarcó Velásquez para deslindar con los cabecillas del Movadef-Conare que representan a la facción ultrarradical del magisterio.
Precisó que la dirigencia nacional del Sutep, “conjuntamente con los maestros de los comités de lucha regionales, tenemos que conversar con el Presidente para encontrar solución a los problemas”.
Añadió que el Sutep ha enviado un documento al presidente Kuczynski aceptando a invitación a conversar.
El líder del Sutep invocó de paso a los dirigentes de la facción rival a participar.
“Es importante que los demás dirigentes que están en lucha también acepten”, sostuvo.
FRENTE AMPLIO. Dirigentes docentes son recibidos en el Congreso. Un grupo de parlamentarios del Frente Amplio recibió en el Congreso de la República a 15 dirigentes de la huelga magisterial.
Horacio Zevallos Patrón, hijo de uno de los fundadores del Sutep, Edilberto Curro y Wilber Rosas acogieron a los representantes en huelga, en tanto la Av. Abancay era escenario de escaramuzas entre maestros y policías.
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