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“Somos el único hospital en el distrito más grande y poblado del país. Somos un hospital pequeño, pues contamos con 133 camas para atender a más de un millón de habitantes. Por eso, no nos damos abasto y existen carencias”.
Las palabras del director del Hospital San Juan de Lurigancho, John Ramírez Castillo, resumen perfectamente la crítica situación que padece dicho nosocomio de 40 años de antigüedad, ubicado en la avenida Canto Grande.
Tanto Ramírez como los usuarios y trabajadores del hospital coinciden en que los problemas más agudos son las carencias de infraestructura adecuada y equipos médicos para tratar a los pacientes.
DETALLES. El área que causa mayor preocupación al personal médico es Emergencia. Aunque funciona en un espacio nuevo, la atención no es óptima, pues todos los implementos son viejos y no hay equipos médicos.
En un recorrido por este servicio, Correo comprobó que las camillas son antiguas e incluso algunas están rotas. A los enfermos apenas los separa un metro de distancia y cuando son revisados no tienen privacidad.
“Bajo estas condiciones debemos atender a los 90 pacientes que vienen a diario”, señala Mirtha Basurto, del Sindicato de Obstetras.
En tanto, Ramírez Castillo señala que ese panorama se debe a que la construcción del área no contempló su equipamiento.
Una situación similar se da en el área de ginecoobstetricia, donde las madres que están a punto de dar a luz deben soportar las contracciones en pequeños ambientes y camillas de 20 años de antigüedad.
Asimismo, en el servicio de Cuidados Intermedios son los bebés de tan solo unos días de nacidos quienes lidian con un ambiente precario.
EVALUACIÓN. La Comisión de Salud y Población del Congreso visitó ayer el hospital para conocer su estado. Sin embargo, no pudo concretar su objetivo, pues los pacientes se mostraron exaltados.
Tras una reunión con Ramírez y el alcalde del distrito, Juan Navarro, el congresista César Vásquez señaló que urge la reconstrucción del nosocomio, al que dio la categoría de nivel III-1, superior a la que tiene. “En equipamiento e infraestructura la inversión superaría los 300 millones de soles”.
Además, consideró que la declaratoria de emergencia en los hospitales de Lima, por un plazo de 90 días, es un paliativo momentáneo para enfrentar la crisis del sector salud, pero lo que se requiere es incrementar 0.5% del Producto Bruto Interno al sector Salud.
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