Debido al derrame de miles de barriles de petróleo por dos roturas en el Oleoducto Norperuano en menos de un mes, Petroperú recibiría una multa de S/59’250,000, equivalentes a 15 mil Unidades Impositivas Tributarias (UIT), informó el ministro del Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal.
La sanción se daría luego de que se evidenciara la fuga de unos dos mil barriles de petróleo a la altura del kilómetro 441 del ducto norperuano, en el distrito de Imaza, provincia de Bagua (Amazonas), ocurrido el pasado 25 de enero.
Hasta el momento, 300 lugareños trabajan en el recojo del crudo.
En forma paralela se produjo otra fuga de aproximadamente mil barriles del negruzco combustible en el kilómetro 206 del mismo tubo (Ramal Norte), ubicado en el distrito de Morona, provincia Datem del Marañón (Loreto), el último 4 de febrero. En la zona, 180 residentes retiran en barriles el carburante.
Contaminación. Hasta esas zonas llegó un equipo del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) que ha cualificado los daños que aún no han sido precisados, pero para el titular del Ambiente, es necesario que se remedie de inmediato, pues se trataría de una reincidencia por negligencia.
Mientras tanto, el hidrocarburo avanza por caudales que podrían llegar al río Marañón, uno de los principales afluentes del curso alto del río Amazonas, en la vertiente del Atlántico.
“El último derrame de petróleo se debió a que Petroperú no cumplió con el plan de mantenimiento del ducto, por lo que podrían darse nuevas roturas”, alertó Pulgar-Vidal.
Correo conversó con el presidente del directorio, Germán Velásquez Salazar, quien llegó a Lima la noche del viernes luego de permanecer cuatro días internado en los lugares perjudicados por el combustible.
“Se han colocado barreras hasta la quebrada Inayo. El oleoducto tiene un sistema de censores que nos alerta cualquier falla. Cuando hay un cambio de presión, asumimos que hay un derrame y se corta el flujo del petróleo. Se identifica, se controla y eso es lo que se hizo”, explica.
De otro lado, desmintió que el derrame se haya producido por la antigüedad de los ductos. Dijo que este transportador de óleo en Amazonas no tiene más de 38 años, mientras que el de Loreto tiene 34.
El ministro Pulgar-Vidal, por su parte, alertó que se podrían dar nuevas fugas de petróleo si Petroperú no realiza un plan de mantenimiento de esta infraestructura.
cuidado. “Ese ducto requiere de un mantenimiento urgente. Hay que tomar medidas preventivas y correctivas. Tienen que bajarle la presión al bombeo de petróleo, porque se van a seguir produciendo roturas. Este es un ducto viejo, de 1974”, destacó el ministro.
Subrayó que este hecho es una reincidencia que será estrictamente penada.
“Tiene que haber una sanción muy severa. El presidente nos ha pedido que seamos muy severos, aunque se trate de una empresa estatal. No podemos permitir que este tipo de situaciones se produzca”, sostuvo y reiteró que no escatimarán en verificar que todo sea saneado de acuerdo a ley.
Por su parte, el presidente del directorio de la compañía estatal se comprometió a indemnizar a todos los afectados, así como a dejar las áreas naturales con vida.
Esta remediación tardaría unos cinco meses más y alegó que las causas del rompimiento de este tubo de 1106 kilómetros de largo aún están en investigación.
“De acuerdo al informe de expertos en análisis y resistencia de metales, el evento ha sido provocado por factores externos que todavía están por determinarse”, alegó el presidente del directorio de Petroperú.
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