Lima llega a 31 grados y Sedapal decreta restricción del agua en 26 distritos

Ciudadanos de Lima Metropolitana y el Callao sufren un martirio debido al sorpresivo corte del suministro de agua potable que desde la noche del jueves está ejecutando Sedapal.

Mientras que los vecinos de 26 distritos esperaban impacientes que el líquido bendito saliera de sus cañerías ayer, para poder refrescarse de la sofocante temperatura, el presidente de Sedapal, Rudecindo Vega, informó que la empresa a su cargo tuvo que ejecutar el corte debido a que la corriente del río Rímac, que abastece a la mayor parte de Lima, está llegando con demasiado lodo, piedras y desperdicios a La Atarjea.

“El grado de contaminación supera en un 300% los límites máximos que ha registrado Sedapal”, precisó Vega.

Estos elementos -dijo- hacen que sea casi imposible procesar el agua que debería llegar hasta nuestros hogares.

Carencia. Por ejemplo, los vecinos de los distritos de Lima Norte salieron a las calles para recolectar agua. Hicieron largas colas en las áreas verdes, provistos de cubetas, bidones y hasta botellas. Al respecto, los alcaldes de San Martín de Porres, Adolfo Mattos, y Los Olivos, Pedro del Rosario, informaron que proveerán de agua a través de camiones cisternas durante el tiempo que permanezca la emergencia. En tanto, la empresa de agua y alcantarillado repuso ayer el suministro, pero solo durante tres horas en la tarde, lo que generó la indignación de los vecinos de San Isidro, San Miguel, Santiago de Surco, Surquillo, Barranco, Breña, Lince, Miraflores, Comas, Chorrillos, La Victoria, San Juan de Miraflores, San Luis, Magdalena y Jesús María.

Asimismo, en Pueblo Libre, Independencia, Villa María del Triunfo, San Borja, Villa El Salvador, Rímac, Cercado de Lima, La Perla, Carmen de la Legua, Bellavista y Cercado del Callao, la momentánea solución fue insuficiente ya que en algunas de estas jurisdicciones el agua nunca llegó, o lo hizo cargada de tierra o con mal olor.

Por su parte, la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (SUNASS) pidió a la población usar de manera racional el agua potable, en especial en situaciones extremas como las que viene afrontando Sedapal ante la excesiva turbidez del recurso.