Adrián del Águila: “Parece que la misión del sistema es aplastar el espíritu”
Adrián del Águila: “Parece que la misión del sistema es aplastar el espíritu”

La necesidad de lograr sus planes a futuro originó que los protagonistas de esta novela pongan a prueba su voluntad. Se han unido a una corporación norteamericana para crear una “solución de negocios” que debe ser vendida a un banco nacional. Los especialistas con los que trabajan parecen vivir más de sus mentiras, las cuales estos personajes se fuerzan a crear para evitar pensar en el fracaso. Están sumergidos, al parecer sin salida, en el Sistema perfecto (Borrador Editores, 2018).

¿Cómo nace esta historia, tu segundo libro? 

Vivo en el mundo de las consultorías, donde todo es un buen “floro”. Hay gente que sí conoce el trabajo, pero también están las personas que dicen conocer el campo, pero solo hablan para quedarse con el puesto. “Lo aprenderé en el camino”, es una frase muy común, que va acompañada de amanecidas para entregar lo que habías prometido.

¿Por qué los personajes sacrifican su presente por un futuro que quizás no vivan? 

En el libro hablo del “Tú debes”, en palabras de Nietzche. Nos han dicho, desde que nacemos, que hay ciertos valores u obligaciones que debemos cumplir. Ahora se hace todo más difícil de sacarlo de encima. Es como una olla a presión: al final algunos reventamos para no someternos. Parece que fuera la misión de cualquier sistema aplastar el espíritu.

"Nos han dicho, desde que nacemos, que hay ciertos valores u obligaciones que debemos cumplir”

A pesar de que los personajes conocen el riesgo, terminan dejándose estafar. ¿Acaso nunca quisieron ver el problema? 

Es como ponerte esos visores que usan los caballos, y solo puedes observar hacia una dirección. Lo he vivido así; también me ha tocado ser espectador. La presión es tan fuerte sobre uno que no te permite ver. Son muy pocas las personas que tienen claras las cosas. A veces las cosas sutiles pueden ser evidentes.

Uno de los protagonistas, al explotar, termina sumergido en el abandono. ¿Se puede escapar de este “sistema perfecto”? 

No creo que se pueda hacer, pero sí puedes evitar ser absorbido. Por ejemplo, trabajar para vivir. En mi caso, trato de no sepultarme en proyectos a los que les deba dar casi todo el día. Hay que lograr balancear tu vida entre otras labores que puedes disfrutar hacer. Quizás falta que nos volvamos a educar y vivir libremente. Existe una falsa necesidad económica, por ejemplo. El “sistema perfecto” no te hace feliz, sino servir a otros planes.

¿Qué representa el nacimiento de “Mateo” en un mundo que parece condenado? 

Es una esperanza, un cambio. Los padres, en sus diálogos, ya le están diciendo lo que va a hacer en su vida. Su tío, por otro lado, lo libera. Tratará de evitar que no le quemen la voluntad.

Perfil

Adrián del Águila, autor

Estudió Ingeniería de Sistemas. También participa en diversos proyectos de rock y metal, como Miserable, su banda. Necio (2012) fue su primera novela.