“Vallejo a solas, divagaciones de un profano” (Infolectura,2025) es la reciente publicación de Ángel Gavidia. Incluye testimonios, crónicas, críticas, notas y apuntes en torno a la obra de César Vallejo. El autor no partió de una estructura pre establecida, sino que se fue perfilando en el transcurrir de los años. Está escrito con la honestidad con la cual escribió Vallejo. Es una selección de textos sustentados en los que Gavidia comparte sus interpretaciones y opiniones sobre la poesía vallejiana, destaca la maestría de Vallejo en el uso de la palabra y la profundidad de sus temas como la vida, la muerte y la experiencia humana. Vallejo tuvo una inteligencia superior y creó discípulos e influenció en muchos escritores. Este libro consta de cuatro partes, las cuales analizamos hoy.
UNO
Gavidia en la primera estancia se fija en la muerte, la madre, Dios y la Navidad. Se incluyen textos titulados: “Algunas disquisiciones en torno a Masa”, “Este poema «XXXII» de Trilce, este poema”, “Piedra negra sobre una piedra blanca: una mirada de parte”, “Cuando me fui de bruces leyendo a Vallejo”, “Mi arribo tardío a Fabla salvaje”, “Considerando en frío, imparcialmente: un intento de juzgar al hombre”, “Vallejo y la madre”, “Vallejo y dos miradas de Dios”. Gavidia cierra este capítulo opinando sobre el reciente hallazgo “Navidad perdida 106 años. (p, 79).
Navidad. En efecto, “Navidad” (1918) fue publicado en el diario “La Prensa”. Este poema en prosa es una muestra de Vallejo y su visión navideña, donde el “Papá Noel” deja juguetes para los niños pobres, pero el hablante se siente profundamente triste y solitario, identificándose con las ovejas de la Virgen. El descubrimiento del poema “Navidad”, en 2024, es un aporte significativo, pues no figuraba en antologías publicadas y revela el estilo en transición hacia la vanguardia, manteniendo la religiosidad familiar, pero con la profunda melancolía que lo caracteriza, según Infobae y El Comercio Perú.
Poema en prosa. Leamos “Navidad” de César Vallejo: “Navidad/Hoy vendrá Navidad. Zambullido entre el ruido pegajoso de imbéciles caldeos y tirios anacrónicos, con mi imperial silencio, y asistido por mis feroces sueños invencibles, hago tarde, llamo a dolor; ¡campana, campana, campana! Hoy el níveo Noel, remoto hebreo, alucinantes las manos abuelas dejará en las camas de los niños pobres el juguete milagroso o el fragante bombón que el Niño Jesús envía a sus amiguitos de aquí abajo. Hoy vendrá Navidad; y vendrá triste en mí, muy triste en mis ojos pascuales de pastor solitario y perdido. Así balaréis vosotras, ovejas mías, ovejas del señor, dulces gotas de leche de la Virgen María”.
Hallazgo. “Navidad” era un poema inédito recientemente descubierto en la Biblioteca Nacional del Perú en el archivo correspondiente al diario “La Prensa” del 25 diciembre de 1918. Este ofrece una visión desgarradora de la festividad. En lugar de alegría, el vate peruano proyecta su propia tristeza como sentimiento predominante. Este reciente hallazgo fue posible gracias al investigador Wilmer Cutipa Luque. El poema que hasta poco no se encontraba en registros conocidos de la obra de Vallejo, ahora revela algunos de los temas que el poeta exploraría en su obra posterior. Sobre la Navidad tenemos los poemas “Nochebuena” y “Bajo los álamos,” en “Los Heraldos Negros” (1918), y en Trilce (1922), “Poema XIX”, con imágenes bíblicas, erotismo velado, angustia metafísica y un sentimiento de límite existencial.
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DOS
Gavidia en el segundo apartado presenta los textos: “Un poema de Hernández con (intenso) sabor vallejiano”, “Vallejo y Borges en una misma esquina”, “Vallejo, Ribeyro y una tilde”, “Otra vez Hernández y algo parecido a una omisión”. La unidad temática es Vallejo, emparentado con la obra, pensamiento y actitud de otros autores hispanoamericanos. La solvencia referencial y los matices anecdóticos contribuyen a las aclaraciones y/o suman a la vigencia de los escribas.
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TRES
En la parte tres se lee: “Stratford, Santiago de Chuco, Shakespeare, Vallejo”, “El cementerio de Santiago, el de Montparnasse y Vallejo”. Debemos tener en cuenta que Gavidia es también un destacado médico, de ahí sus ensayos “La madre de Carrión y dos poemas de Vallejo”, “La pandemia y Vallejo” y “Vallejo y la medicina”. Al leer su texto “Vallejo y yo” (p.135) se identifica sus lecturas que le fueron alineando su vida en teoría y práctica. Otros interesantes títulos son “Declamando a Vallejo”, “Vallejo: ¿un infante de pelo largo?”, “Menocucho, Irichugo y Tayanga: las otras huellas de Vallejo” y “Para cuando no haya: a propósito de dos textos de Vallejo”.
CUATRO
Cierra el libro con “El habla de Santiago de Chuco en la poesía vallejiana”, bien estructurado y que aporta a los académicos, como señala Danilo Sánchez en el prólogo: “Esa simbiosis no solo es de creadores auténticos y cabales, como lo son Ángel Gavidia y César Vallejo, sino que esa conjunción de poetas es de la misma tierra, de la provincia de Santiago de Chuco. Por dicha razón, Ángel se da el lujo de entrar a veces por un resquicio, por un detalle y una grieta que solo él conoce. Donde a ratos mira subido en el terrado en el que se guardan las viejas cosas” (p.13). Enhorabuena.
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