Tras ganar la tanda de penales ante Uruguay, el capitán de la selección peruana Paolo Guerrero no pudo contener la emoción y corrió a darle un beso a su compañero, el guardameta Pedro Gallese, quien lucía cansado tras haber atajado heroicamente los penales de los uruguayos.
La felicidad de ambos fue reflejada en varia fotografías en el Estadio Arena Fonte Nova de Salvador de Brasil.
Hoy vimos una tanda en la que el portero Pedro Gallese se redimió del 0-5 contra Brasil deteniendo el primero a Luis Suárez para encauzar la clasificación.
Gallese, goleado hace una semana por la 'Canarinha' y señalado tras el segundo tanto brasileño en el que un error suyo en el envío fue aprovechado por Roberto Firmino, se redimió deteniendo el primer penalti, el más psicológico, a todo un goleador como Suárez y haciendo bueno el ejercicio de resistencia peruano.