El extitular de la Asociación Nacional de Fútbol Chilena Harold Mayne-Nicholls sindicó a Manuel Burga como uno de los dirigentes que intentaron obligarlo a firmar un nuevo contrato con una empresa de televisión.
Más millones
“Traffic pagaba 8 millones de dólares por la Copa y el nuevo contrato era $33 millones. Si había un contrato en vigor, me parecía ilegal que suscribiéramos uno nuevo. Me acuerdo que (Luis) Chiriboga (titular de la federación ecuatoriana), (Manuel) Burga (de Perú) y Osuna (Bolivia) se me acercaron y me pedían que firmara. En la última reunión, ese papel ya venía firmado por los nueve colegas de federaciones y el único que no firmó fui yo”, reveló el chileno.
Vergüenza. Harold Mayne-Nicholls se avergüenza de la conducta de los dirigentes que manejaron el fútbol sudamericano. “Tengo una vergüenza muy grande al ver que aparece gente que era con quien uno compartía en el Comité Ejecutivo de la Conmebol. Tengo una molestia gigantesca porque todos los dólares que salieron para esas personas le pertenecen al fútbol mundial. Ellos (directivos implicados en el FIFA Gate) fueron electos para honrar, proteger y desarrollar el fútbol y lo traicionaron”, expresó el exdirigente.
Colaboración eficaz. El chileno también criticó la actitud que tuvieron los dirigentes, quienes optaron por acogerse a la figura legal de colaboración eficaz. “Al entregarse voluntariamente a la justicia a cambio de información quedan, además, como unos delatores y soplones. Es decir, no tienen ningún código, sino que están llenos de avaricia y de codicia”, agregó.
Hasta el momento, Harold Mayne-Nicholls es el único ex alto mando de la Conmebol que no ha sido incluido en las investigaciones de la fiscalía de Estados Unidos que preside la jueza Loretta Lynch.
Plazo
La fiscalía de Estados Unidos tiene plazo hasta el 9 de febrero para presentar el pedido de extradición de Manuel Burga a Norteamérica.
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