En una espectacular fiesta llena de melancolía y con Coldplay, Jay-Z y Rihanna como protagonistas se dieron por concluidos los que han sido calificados como los mejores Juegos Paralímpicos de la historia tanto por su nivel competitivo como por el entusiasmo generado.

Con el estadio Olímpico nuevamente lleno con más de 60 mil personas, el plato fuerte de la velada fue Coldplay, que se puso a los espectadores en el bolsillo con canciones como "Yellow", "Paradise", "Speed of Sound" o "Viva la Vida".

La ceremonia de clausura también contó con la participación de soldados heridos, miembros de la asociación "Help for Heroes", que ayuda a los militares con secuelas de Afganistán e Irak, la Paraorquesta Británica y la estrella del pop Rihanna y el rapero Jay-Z que actuaron con Coldplay.

Tras la interpretación del himno británico y la entrada de los abanderados de todos los países al estadio, dio comienzo la fase más espectacular de la ceremonia con unas gigantes máquinas de estética "steampunk" invadiendo el estadio.

El cálido aplauso que recibieron dio paso al momento más esperado de la velada: la aparición de Coldplay al estadio acompañados por varios grupos artísticos que con sus diferentes números, muchos de ellos interpretados por personas con algún tipo de discapacidad, simulaban el paso de las estaciones del año.

Con el inicio pegadizo de "Paradise", una decena de bailarines aparecieron flotando en el cielo londinense imitando la forma de unas luciérnagas, en uno de los momentos más hermosos de la noche que cada vez tomaba un cariz más melancólico.

Un ambiente melancólico que Rihanna, con "We Found Love", se encargó de convertir en festivo y que Chris Martin y compañía remataron con su conocidísimo "Viva la Vida", con decenas de miles de espectadores coreando la letra y confeti lloviendo sobre el estadio.

Con todo el estadio de pie con "Every Teardrop is a Waterfall" de Coldplay y unos espectaculares fuegos artificiales, terminó definitivamente la tercera experiencia olímpica de Londres en la que el movimiento paralímpico ha vuelto a sus orígenes con unos Juegos que, como señaló Craven, "siempre quedarán en el recuerdo".