Una vez más, San Martín dio la vuelta olímpica, pero en esta ocasión con todas las de la ley, pues consiguió el bicampeonato, aunque este logro casi podía considerarse un hecho, ya que era muy complicado que la "U" llegue al sétimo puesto y ambos definan el título en un play off.

A San Martín el título no se lo regaló nadie y además, para alejar cualquier sospecha de que haya estado regalando los partidos a fin de evitar que la "U" consiga su objetivo, empató 2-2 ante José Gálvez en Chimbote.

Lo que sí es cierto es que el equipo dirigido por el Chino Rivera no mandó al campo de juego a sus jugadores titulares. Pero con un equipo alterno se lanzó en busca de una sorpresa. Los santos abrieron el marcador a los 12 minutos, cuando Jair Vásquez, en su intento por rechazar la pelota, mandó el balón a su propio arco ante la sorpresa del golero Jaime Muro.

Al menos el gol entretuvo a la tribuna, porque en el campo no se veía un juego vistoso, pero como Gálvez quería ganar el partido, se lanzó en pos de la paridad y la logró a los 23´ por intermedio de Carlos Ibarra con un fuerte disparo. Sin embargo, San Martín parecía que había tomado el encuentro con mucha seriedad, ya que tres minutos después Manuel Barreto adelantó a su equipo al anotar el segundo. El partido era muy disputado y por eso los chimbotanos no desperdiciaron la oportunidad de igualar: a los 32´, otra vez Ibarra venció el arco santo.

FINAL CON CELEBRACIÓN. En la segunda parte, ambos equipos jugaron con mayor tranquilidad y las ocasiones de gol, a diferencia del primer tiempo, dejaron de existir. Al final, los abrazos del equipo santo no se hicieron esperar. Avalados esta vez por no haber perdido su partido, volvieron a dar la vuelta olímpica, aunque sin mucha euforia, pero con la misma convicción de haber logrado un buen bicampeonato.