¿Una maestría puede ser el punto de partida para fundar una startup? La respuesta es afirmativa, y cada vez más ejemplos lo confirman en el dinámico ecosistema de emprendimiento del Perú. Según datos de la Asociación Peruana de Capital Semilla y Emprendedor (Pecap), en el país se crean alrededor de 200 mil startups al año y se han invertido 257 millones de dólares en emprendimientos durante los últimos tres años.
En este contexto, surgen espacios educativos que van más allá de la teoría y se convierten en semilleros reales de innovación. Uno de esos casos es el de Eladia, un copiloto de inteligencia artificial para equipos de arquitectura que nació como proyecto dentro del Tech MBA de UTEC Posgrado. La solución surgió al detectar una brecha en la productividad de estudios de arquitectura, y hoy cuenta con más de 30 usuarios activos y 7 estudios asociados, logrando reducir un 60 % las coordinaciones en obras y con el potencial de generar un ahorro superior a los 700 millones de dólares anuales en costos operativos.
“En un posgrado de tecnología, la finalidad de un proyecto puede ir más allá de la especialización académica. En el Tech MBA lo vemos cada año con cientos de proyectos capstone”, explicó Kevin Granda, docente en UTEC Posgrado y Managing Partner en UTEC Ventures.
Según Granda, un posgrado con enfoque tecnológico y emprendedor debe ofrecer tres herramientas esenciales:
Herramientas clave para emprender desde una maestría
- Metodología aplicada: Enfoque práctico que simula programas reales de inversión, con mentorías e interacción directa con startups e inversionistas.
- Red de conexiones: Acceso a mentores, CTOs, fundadores e inversionistas que apoyen el desarrollo de soluciones tecnológicas viables.
- Formación en fundraising: Entrenamiento en levantamiento de capital, preparación de pitch, validación de problemas y modelos de negocio.
A estas herramientas se suman habilidades clave que el estudiante de posgrado debe desarrollar para tener éxito en su camino emprendedor:
- Capacidad de investigación: Identificar y validar problemas reales mediante research y contacto directo con usuarios.
- Habilidad para conectar y vender: Saber comunicar la visión, vender el producto y construir redes sólidas dentro del ecosistema emprendedor.
- Conocimientos financieros básicos: Manejar recursos estratégicamente y entender la lógica económica de su modelo de negocio.
- Experiencia en el sector: Tener conocimientos previos de la industria permite detectar oportunidades más profundas y ganar credibilidad.
En resumen, un posgrado bien diseñado puede ser mucho más que un paso académico: puede convertirse en el punto de partida de una startup real, con impacto tangible y oportunidades de escalamiento.