El contexto de los pagos digitales y su perspectiva social y ambiental es una de las tendencias que analiza en profundidad el XIII Informe de Minsait Payments sobre Tendencias en Medios de Pago que presenta todos los años y que constituye un punto de referencia sobre esta industria.
El informe de la compañía de tecnología de pagos, subsidiaria de Indra, recoge las opiniones de más de 4.800 personas internautas bancarizadas (ABI) de España, Italia, Portugal, Reino Unido y Latinoamérica (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú y República Dominicana).
La digitalización de los pagos entre la población adulta bancarizada internauta (ABI) de Latinoamérica se ha acelerado en los últimos tres años, y ya es una mayoría en Colombia, México, Perú y Argentina, que declara ser usuaria de medios de pago digitales desde hace tres años o menos.
En Perú, cerca de la mitad de los peruanos (54%) declara haberse incorporado a la digitalización de sus pagos en los últimos tres años, ante la irrupción de la pandemia del Covid, coincidiendo con el auge de otros medios de pago alternativos como Plin y Yape.
Hoy en día, aplicaciones como Plin y Yape en Perú, Nequi en Colombia o Pix en Brasil están ganando popularidad para pagos entre particulares (P2P), pero sin igualar aún la preferencia por la modalidad de pago en efectivo, en el caso de los peruanos (47%).
En Latinoamérica, la acelerada digitalización en los últimos tres años ha sido impulsada por la pandemia, así como por otros factores. Entre ellos se encuentra el gradual reconocimiento y autorización de nuevos agentes (financieros y no financieros) de la cadena de valor de los pagos.
A lo anterior se suma la priorización de la interoperabilidad de los sistemas de pago por autoridades y agentes privados, así como el convencimiento de la potencialidad de los pagos inmediatos ante la ausencia de infraestructuras de pagos digitales bien asentadas. Todo esto en un contexto en el que aún persiste el reto de inclusión financiera.
“En la región de Latinoamérica son varios los países que están trabajando para brindar a ciudadanos y empresas la posibilidad de realizar pagos y cobros inmediatos e interoperables de forma asequible, al menos en el segmento P2P. Tal es el caso de Colombia, Chile, Ecuador, México y Perú, inmersas sus autoridades en dicho propósito con especial intensidad desde la pandemia”, dio cuenta el informe.
Tarjetas. En un mercado cada vez más marcado por la preocupación hacia la seguridad, Perú ya registra un 36% de la población bancarizada optando de manera habitual, por la opción sin contacto en sus pagos con tarjeta, y un 46% que lo hace de manera ocasional.
Entre los medios de pago más utilizados, vuelve a destacar la tarjeta de débito en todos los países analizados. Hoy en día, más del 90% de la población bancarizada peruana dispone de una tarjeta de débito para hacer sus pagos, y el 55.3% afirma tener una tarjeta de crédito, cuyo uso es menor entre los usuarios.
Un descenso provisional en el uso de las tarjetas de crédito que se puede vincular al contexto económico actual, donde la inflación y las altas tasas de interés animan a una utilización más cautelosa del crédito y abogan por la estabilidad y la reducción de deudas.
Se constata, además, un incremento de la tarjeta virtual que, hasta ahora, estaba principalmente asociada a la modalidad de prepago, y se amplía su aplicación a las tarjetas de crédito y débito. En Perú, un tercio de la población (el 34%) dispone de una tarjeta de débito virtual, mientras que el 22% cuenta con una tarjeta de crédito virtual.