¿Cuáles son los retos que enfrentará el nuevo gobierno Merino en materia económica?

Tras la vacancia de Martín Vizcarra, y la toma de mando de Manuel Merino, el decano de la facultad de Economía de la UPC, Carlos Adrianzén, analizó las repercusiones de este repentino cambio. El economista señaló que los analistas de riesgo internacional que ha revisado ven con buenos ojos que se depure a un presidente constitucionalmente.

¿Cómo queda la inversión extranjera? “En un país con los problemas del Perú, cuando se habla de inversión extranjera básicamente se refiere a mantener los focos de inversión que ya existen. No le puedes pedir a la gente que sea tan amante al riesgo. Nuestro país es famoso por su tasa de infección. Mientras no resuelvas esto, hablar de inversión extranjera es como dorarle la píldora a la gente”, señaló.

Asimismo, indicó que los inversionistas que ya están en el país van a seguir operando con normalidad, y se seguirá reflejando la cifra que representan del PBI, de 2 o 3 puntos porcentuales. Añadió que ningún inversionista extranjero que vea que se vaca a un presidente por el canal constitucional se va a ir del Perú.

Adrianzén puso como paralelo a Corea del Sur, cuando metían presos a los presidentes, la economía reverdecía y los coreanos decían cómo es posible. “Es que la gente de fuera ve las cosas más fríamente”.

Con respecto a la política que debe seguir el gobierno entrante en materia económica, señaló que lo importante es respetar la autonomía del Banco Central de Reserva (BCR). Para el decano de Economía de la UPC, lo que debe hacer el nuevo presidente es elegir a una persona seria como presidente del Consejo de Ministros y este debe manejar la economía, calibrando los errores de la saliente gestión.

Precisó que la ministra Alva tuvo pésimos indicadores. “Así que hoy día ha salido el sol, aunque muchos peruanos no lo vean así”.

¿Cómo quedan los proyectos de infraestructura? Adrianzén apuntó que lo último que debe hacer el gobierno entrante es gastar un sol en proyectos de infraestructura. La prioridad debe ser atender a las personas, darle más recursos a Salud y a Interior para que las personas puedan salir a trabajar.

“Hoy día tenemos Reactiva Perú, pero tenemos los protocolos que nos estrellan contra la pared. Lo que debería hacer este gobierno de ‘transición’, llamémoslo así, es empujar los protocolos más inteligentemente para que la gente pueda trabajar”, explicó.

CORTO Y LARGO PLAZO

Por su parte, Hugo Ñopo, investigador principal de Grade (Grupo de Análisis para el Desarrollo), señaló las repercusiones a corto plazo y largo plazo con el cambio de gobierno. La de corto plazo, indicó, es el Presupuesto Público 2021 que se tenía que ver este mes. Ojalá el Congreso convoque a especialistas que vayan a hacer esto bien, dejando de lado el populismo.

“Durante 30 años hemos tenido una macroeconomía sólida porque hemos dejado que de eso se encarguen los técnicos. Es un tema que debe hacerse con mucha solidez”, acotó Ñopo.

En el largo plazo hay que preservar la institucionalidad, dijo. Puso como ejemplo la Sunedu, “que se encarga de velar por el buen funcionamiento del sistema que forma a nuestros nuevos profesionales. Se venía avanzando bien en una reforma, esta es una tarea de largo plazo que tiene que mantenerse”.

Para el experto, lo que ha sucedido ahora es que no va a haber un balance de poderes. Los riesgos son muy grandes, porque lo que va a impulsar el Congreso son medidas populares, puntualizó.

En esa línea, cuestionó qué va a pasar con la pandemia, si viene una segunda ola y si podremos controlarla. “Porque eso es lo que está limitando y seguirá limitando la posibilidad del despegue económico. Entonces allí hay un tema enorme pendiente”.