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Los bienes del Gasoducto del Sur no están en manos del consorcio Gasoducto Sur Peruano (liderado por  e integrado por Enagás y Graña y Montero), sino en poder de una filial de la empresa brasileña, precisó a Correo el especialista en hidrocarburos César Gutiérrez.

Explicó que Odebrecht Construcciones era la encargada de construir el Gasoducto del Sur, pues firmó un contrato interno con el consorcio que lideraba su matriz para hacerse cargo de esa responsabilidad.Es decir, Técnicos S.A.S., empresa seleccionada por el Osinergmin para que administre esos bienes, no puede acceder a ellos en tanto no se determine responsabilidad. 

INTERVENTOR. Gutiérrez refirió que el gran error del Gobierno es haber emitido un decreto de urgencia (DU) en el que se impone la figura de un administrador, cuando debió haber apostado por un interventor para que supervise esos bienes. Ello por la dificultad que representa recuperar los bienes del consorcio.En ese sentido, se preguntó si acaso en el Gobierno se desconocía que el consorcio tenía un contrato interno firmado con Odebrecht Construcciones.

“Además, contratar una empresa por $46 millones para que administre los bienes no fue lo más recomendable, más aún si el dinero sale de los $260 millones de la garantía que ejecutó el Estado al consorcio luego de la resolución del contrato”, precisó.Agregó que es necesario determinar quién entregará los bienes al administrador, pues “mientras tanto pasa el tiempo y el administrador no tiene bienes que resguardar”.

INICIAR ACCIONES. La titular de Energía y Minas, Cayetana Aljovín, se refirió al DU indicando que establece que los bienes tienen que ser entregados; “si no, se iniciarán las acciones del caso”.Sin embargo, no precisó a qué acciones se refería para hacer que el consorcio entregue los bienes del gasoducto para que Técnicos los administre.Explicó que el error del Estado por apostar por un administrador está siendo aprovechado por Odebrecht para iniciarle un arbitraje por $2 mil millones.

DATO 

Contrato. En enero de este año, el Gobierno finalizó el contrato con el consorcio responsable del gasoducto por falta de financiamiento.

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