Los reguladores de Estados Unidos y Europa podrían aprobar la vacuna experimental para el COVID-19 del laboratorio Pfizer y BioNTech a mediados de diciembre, es decir antes de Navidad, adelantó Ugur Sahin, presidente ejecutivo de BioNTech, tras la publicación de resultados positivos de las pruebas.
El ejecutivo de la firma de biotecnología alemana señaló, en Reuters TV, que si todo va bien, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos podría conceder la aprobación de uso de emergencia hacia finales de la primera quincena de diciembre o principios de la segunda.
Añadió que la aprobación condicional de la Unión Europea podría lograrse en la segunda mitad de diciembre, según informó el portal Forbes México.
“Dependerá de las solicitudes que recibamos y de si se cumplen todas las condiciones”, afirmó.
El pasado miércoles, los socios revelaron los resultados de las pruebas que mostraban que su vacuna tenía una tasa de eficacia del 95% en diferentes grupos de edad y sin efectos secundarios graves, un hito importante en la carrera para poner fin a la pandemia.
SOBREDEMANDA
Sahin dijo que cualquier vacuna contra el coronavirus que supere los obstáculos reglamentarios en los próximos meses será tomada por los sistemas de salud de todo el mundo, independientemente de sus méritos relativos, ya que la demanda superará con creces la oferta.
“No espero una situación competitiva durante los primeros nueve meses porque cada dosis de vacuna aprobada que alguien pueda suministrar es bienvenida y probablemente será utilizada”, enfatizó.
Moderna publicó el lunes datos preliminares de su vacuna, los que mostraron un 94.5% de eficacia. AstraZeneca, que trabaja en una vacuna con la Universidad de Oxford, espera publicar los resultados de su prueba masiva antes de fin de año.
“Las primeras cinco u ocho compañías (en obtener la aprobación) no se interpondrán en el camino de la otra (…) Asumo que no será antes de mediados de 2021 que cada vacuna tendrá que distinguirse con un perfil específico”, dijo Sahin.
Sostuvo que BioNTech y Pfizer estaban trabajando en una formulación refinada de la vacuna que no requerirá almacenamiento ultra frío para facilitar su manejo en los países en desarrollo. La versión más robusta, posiblemente, se lanzará durante el segundo semestre del próximo año, estimó.
Por ahora, la vacuna de BioNTech debe ser almacenada y transportada a -70°C, pero puede mantenerse en una nevera normal hasta cinco días o hasta 15 días en una caja de transporte térmico.