¿Posee un negocio familiar?

Tener un negocio familiar es una tradición en muchos hogares ya sea con una empresa de abarrotes, calzado, hoteles, cocina, carpintería, etc. Para que esta forma de comercio siga su rumbo sin complicaciones ni con problemas entre los miembros de la familia, es recomendable prestar atención a las siguientes recomendaciones:

A pesar de que padres e hijos puedan ejecutar las mismas funciones dentro del negocio, será indispensable que se establezcan roles según las cualidades personales. De esta forma también habrá un mejor seguimiento de lo que cada uno realice y se podrá evaluar los avances que se han logrado.

Las normas no deben ser ajenas a este tipo de negocio. Los horarios de ingreso, el tiempo de trabajo, los permisos y otros aspectos deben estar claros para cada colaborador.

Así como hay responsabilidades, también es importante fijar metas a corto, mediano y largo plazo. Estas deben involucrar a cada miembro de la familia que labore en el negocio para que el espíritu de competitividad esté presente en el ambiente.