Riesgo de que el próximo gobierno postergue la reducción del IR es remoto

Pensar que en 2016 y 2017 no se efectuará la reducción del Impuesto a la Renta (IR) es prever un escenario alejado de la realidad. Así lo estima la supervisora del área de Tax & Legal de la consultora KPMG, Ana Vidal, quien considera que el riesgo es mínimo porque esta medida fue producto de un consenso por parte de la mayoría de agrupaciones políticas.

“El riesgo de un retroceso es remoto porque es una meta a largo plazo. Tampoco es imposible, pero es muy difícil que suceda. (...) Tendría que salir el típico outsider o alguien que no ha estado involucrado en la toma de decisiones respecto a las políticas de Estado”, destacó a Correo tras la conferencia “Beneficio Fiscal”.

Cabe indicar que la reducción del IR fue una iniciativa que quedó aprobada el año pasado con el fin de beneficiar a los trabajadores de cuarta y quinta categoría, y a las empresas hasta el año 2019. Sin embargo, a mediados de noviembre de este año, el presidente del Banco Central de Reserva planteó postergar la reducción del IR previsto para 2017 debido al déficit fiscal del país.

LARGO PLAZO. Por otra parte, la especialista explica que otro motivo por el que no debería existir una gran preocupación es que esta iniciativa forma parte de una política de Estado con un objetivo claro: el ingreso a Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), conocida también como el “club de los países desarrollados”.

“Esta reforma que se hizo para elevar la redistribución de dividendos y a la vez para disminuir la tasa de impuesto contributivo para las empresas ha sido una norma consensuada, fue vista con buenos ojos por la mayoría de agrupaciones políticas y fue tomada teniendo en cuenta el objetivo de que el Perú pueda ingresar al grupo de países de la OCDE”, comenta.

2016. Más allá de la expectativas para el próximo año, Vidal destaca que existen varios beneficios tributarios que las empresas pueden aprovechar a través de los regímenes actualmente vigentes.

“Lo principal que deben cuidar las pequeñas empresas es ver si pueden acogerse a algún régimen especial. Si pueden acogerse al régimen del Impuesto a la Renta van a tener el gran beneficio de una tasa impositiva menor porque van a tener menor carga administrativa”, indica.

En caso de concluir que no se califica para ningún régimen especial, la recomendación de Vidal se centra en evaluar los gastos: “Les diría que evalúen someterse a una asesoría especializada para ver los puntos específicos de los gastos que son los que suelen adicionar a su base del impuesto a la renta anual”.

INNOVACIÓN. Otra opción, explica, son los beneficios de la Ley 30309, la cual busca estimular la investigación científica y la innovación por medio de la reducción del IR.

“Está enfocado para compañías que tienen un giro con fuerte inversión en desarrollo de productos y procesos o investigación”, aclara.

Algunos ejemplos son las empresas del sector minero, manufactura industria y los laboratorios farmacéuticos. Sin embargo, también es factible que algunas pequeñas unidades productivas puedan apostar por esta modalidad que permite que las compañías tengan derecho a una deducción de hasta el 75% del pago anual del IR.