Arequipa: Desesperación de pobladores por obtener agua supera al virus y miles se exponen

La población se aglomeró al rededor de los camiones cisterna de agua potable apenas llegaron a los puntos de entrega, zonas que se convirtieron desde hace cuatro días en focos infecciosos del nuevo coronavirus. El desorden, la ansiedad y desesperación, provocó que la gente se aglomere sin guardar la distancia social.

El 4 de julio se registró la rotura de una tubería de conducción de 1,200 mm. de fibra de vidrio, que dejó sin agua potable a la planta de tratamiento Miguel de la Cuba Ibarra.

El incidente dejó sin servicio del líquido elemento al 35 % de la población de la provincia de Arequipa, que comprenden las partes medias y altas de los distritos de Miraflores, Mariano Melgar, Paucarpata, Yura, Cerro Colorado, Cayma y Alto Selva Alegre.

Sedapar proyectó la reparación para el lunes, pero tras la realización de pruebas hidráulicas se registró otra falla en la reparación debido a la presión de agua que soporta la línea. Se cerró el circuito y a más tardar el jueves se repondrá el servicio.

Por tal razón, cerca de 400 mil personas están al borde del colapso, porque llevan más de 100 horas sin el servicio de agua potable. Se agrava la situación cuando 37 camiones cisterna no abastecen a los afectados que hicieron largas cola en diferentes puntos de la ciudad.

FECTADOS. “No llegó la cisterna al paradero Los Canarios del distrito de Cerro Colorado. Desde las 08:00 de la mañana, esperando todo el día con la gente aglomerada y propensa al contagio, no es justo. Ni una gota de agua”, se quejó Alicia Mamani, vecina del pueblo joven Ángeles del Sur.

Mientras tanto, los vecinos de la urbanización Apurímac, en el distrito de Alto Selva Alegre, no respetaron ayer el distanciamiento en su desesperación por recibir un poco de agua de los camiones.

El dirigente de la zona, Jorge Qqueso, lamentó la falta de efectivos policiales y Fuerzas Armadas para hacer respetar las restricciones exponiendo a las decenas de personas que estaban haciendo filas.

“Se han juntado más de 600 personas, porque no hay agua en las casas desde el sábado y están desesperados, pero se debe tener precaución. En otros distritos hay cisternas que pueden apoyar a los lugares que nos quedamos sin liquido elemento, para evitar estas aglomeraciones que nos pueden costar la vida”, explicó.

Sedapar, a manera de mitigar el desabastecimiento de agua, optó por poner en práctica una serie de acciones, como aumentar la cantidad de camiones cisterna de 24 a 37 unidades, habilitar dos puntos adicionales de surtidores de agua, bombeo a reservorios para abastecer por horas a zonas dependientes del R6 La Tomilla, R8 Zamácola, N43 Belaunde, R10 Mariano Melgar, R16 Apima y R17 Avenida Jesús.

EXHORTO

El jefe de la Oficina Defensorial de Arequipa, Ángel María Manrique, recomendó a la empresa Sedapar coordinar con la Policía Nacional y personal de Serenazgo de cada distrito para mantener el orden al momento de que las cisternas doten de agua a la población.

“Los reportes señalan que la gente se fue encima de las cisternas, convirtiéndose en un escenario de contagio de la COVID-19”, señaló Manrique.