Caída de bus a abismo deja 27 mineros sin vida y 13 heridos

La vida de 24 mineros expiró en una ladera del peligroso serpentín Nasca – Puquio, tras la funesta caída de un bus en el kilómetro 41 de la carretera Interoceánica. Otros tres dejaron de existir en el hospital Ricardo Cruzado en Ica. La siniestrada unidad de placa F3Y-959 formaba parte de un convoy de tres buses de la empresa Expreso Internacional Palomino y trasladaba a 43 trabajadores de la unidad minera Pallancata con destino a la región Arequipa.

Desde el distrito de Coronel Castañeda, provincia de Parinacochas, donde opera la empresa minera Ares, hasta el punto donde ocurrió la tragedia, el viaje era tranquilo. Sin embargo, pasado las cuatro de la madrugada de ayer, el conductor perdió el control del ómnibus y rodó sobre el precipicio. Los cuerpos quedaron regados en la pendiente, algunos sin vida y otros heridos. Las rocas frenaron las vueltas de campana que dio el bus.

Ellos se dirigían a Arequipa luego de cumplir su jornada de 20 días de trabajo y la mayoría iba a celebrar el Día del Padre. Las compañías bomberiles de Nasca y Vista Alegre acudieron a la zona del siniestro a rescatar la vida de 13 heridos. Todos fueron internados el nosocomio nasqueño y los que presentaban estado crítico fueron trasladados al Hospital Regional de Ica.

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Las primeras investigaciones del hecho indican que el conductor del bus perdió el control del vehículo en la zona de curvas empinadas. El vehículo sufrió un despiste y cayó a un abismo de 500 metros.

A través de un comunicado, la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) lamentó el accidente y anunció que ha activado todos los protocolos de intervención a fin de recabar la información relacionada al accidente que permita determinar las medidas y sanciones correspondientes.

Precisó que de acuerdo con las primeras investigaciones, al momento del accidente el ómnibus de citada empresa, contaba con Certificado de Inspección Técnica Vehicular (CITV) y Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) vigentes.

Por último, la Sutran confirmó que la unidad accidentada se encontraba realizando un servicio especial de traslado de trabajadores para una empresa privada y contaba con autorización vigente para dicho servicio. Al cierre de esta edición, los familiares de los heridos y fallecidos llegaban a la ciudad de Nasca, desde Arequipa, para conocer el estado de sus seres queridos.

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Adriana Cruz Taype recibió una inesperada llamada la madrugada de ayer. La voz entrecortada le quitó el sueño y la sacó de la cama de un solo golpe. Era su hermano Alejandro quien la había contactado para contarle que se encontraba gravemente herido y que solo un verdadero milagro,  le permitió sobrevivir a la volcadura del bus de la empresa Palomino en el que viajaba junto con sus compañeros de trabajo de la minera Ares.

Adriana Cruz contó que instantes antes de que el bus comenzara a descender por el serpentín que conecta las provincias de Puquio (Ayacucho) y Nasca (Ica), se despertó y se quitó el cinturón de seguridad para acudir a los servicios higiénicos de la unidad.

Cuando la unidad transitaba por el kilómetro 41 de la dicha peligrosa vía, Alejandro Coila retornó a su asiento y segundos antes de que pudiera colocarse nuevamente el cinturón de seguridad, el bus se fue al barranco. Mientras comenzaba a dar vueltas  de tonel (de costado) hasta atravesar la misma pista metros más abajo, Alejandro fue expulsado por una de las ventanas del bus para luego golpearse contra las rocas del cerro.

“Lo que nos ha dicho mi hermano es que no iban a velocidad, el chofer conducía con normalidad. Al parecer lo que pudo pasar es que el conductor se quedó dormido, pero en realidad no lo sabemos. Mi hermano se salvó porque salió por una de las ventanas expulsado”, dice Adriana. Alejandro les contó que él fue trasladado por los bomberos hacia el hospital de Nasca junto a otro compañero de labores que también había sobrevivido a la volcadura, pero dejó de existir en el trayecto.

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“Lo único que pedimos es que nos ayuden a trasladarnos a Ica, entendemos que la empresa se va a hacer cargo de lo sucedido. Mi hermano nos ha dicho que a todos los heridos los van a llevar a Lima”, dice la mujer quien al igual que los familiares del resto de trabajadores sobrevivientes y fallecidos del accidente, acudieron a las instalaciones de la minera Ares, en la segunda cuadra de la avenida Parra (Arequipa), para poder viajar hacia Ica.

Otras personas que también esperaban en la puerta de la empresa, no sabían el estado en el que se encontraban sus familiares como ocurrió con la madre y la tía de Víctor Quispe Ramos (27). Hasta el mediodía vivieron en la incertidumbre, como muchos otros que se mostraban, incluso, renuentes a contar lo que sabían.

Sin embargo, la hermana y tía de Víctor  recibieron una llamada telefónica desde Ica para confirmarles que, lamentablemente, había fallecido. Ambas rompieron en llanto. Luego de pasar por pruebas de antígeno, los familiares, por grupos, fueron embarcados en camionetas 4x4 para desplazarlos hacia Ica.

”Expresamos nuestro dolor por la pérdida de nuestros compañeros fallecidos, y nuestras profundas condolencias a sus familiares, a quienes les brindaremos todo el apoyo que requieran para afrontar el difícil y doloroso momento que nos toca vivir”,  indicó la minera Ares a través de un comunicado.