Choque de buses sigue cobrando vidas
Choque de buses sigue cobrando vidas

Cristina Vilca Mamani (61) y Beatriz Chambi Clavijo (21) fallecieron una después de la otra en el hospital Honorio Delgado Espinoza, como consecuencia de la graves lesiones que les dejó el choque frontal de los buses Santillana y Transportes Del Carpio la tarde del lunes 24, en el kilómetro 8 de la vía de penetración a la ciudad, Uchumayo, sumando a 15 las pérdidas por este lamentable suceso.

A las 03:45 horas del jueves 27, en la sala de Emergencia del nosocomio regional, el corazón de doña Cristina dejó de latir por un paro cardíaco. Su muerte sorprendió a sus seis hijos y a su esposo, Juan, quienes pensaron que se recuperaría después de haber sobrevivido al choque y a la negativa de atención en las clínicas San Juan de Dios y Arequipa.

OPERADA. La mañana del día trágico, Cristina vino a Arequipa de La Joya para hacerse chequear la vista pues le operaron de glaucoma en el nosocomio regional. Estuvo con Juan, su hijo mayor, quien se adelantó en el retorno, abordando otra unidad de Santillana.

El vehículo de placa V6J-966 al que subió la señora, invadió el carril contrario a las 13:30 horas y se estrelló contra el bus de matrícula V7V-957 de la empresa Transportes Del Carpio, que ingresaba a la ciudad procedente de El Pedregal. Aún conmocionada por el choque, cogió el celular y se comunicó con su hija Lina, a quien le dijo que estaba herida.

DINERO. Gilberto contó que a su madre la trasladaron a la clínica San Juan de Dios, donde le negaron atención sino pagaba 5 mil soles como garantía. La empresa Santillana no había entregado el Afocat para la cobertura.

Al día siguiente, trasladaron a la herida hacia la clínica Arequipa, donde la historia se repitió. Por la falta de recursos, Cristina Vilca acabó internada en el hospital Honorio Delgado a las 13:00 horas del miércoles. Unas 12 horas después, falleció.

“No puede ser que en las clínicas antepongan el dinero a la vida. A mi madre no la quisieron atender, porque no teníamos dinero y la empresa no presentó el SOAT a tiempo”, refirió Gilberto, consternado por la muerte de su progenitora.

SUEÑOS FRUSTRADOS. Seis horas después de la partida de Cristina, en la sala de Trauma Shock de Emergencias del Honorio Delgado, los sueños de Beatriz Chambi Clavijo (21) de convertirse en chef se desvanecieron con un último aliento.

Rodolfo Clavijo refirió que el corazón de su sobrina se detuvo a las 09:00 horas. Su madre, María Clavijo García (37), recibió la noticia del deceso de la mayor de sus tres hijos en una de las camas de Cirugía Mujeres del hospital Goyeneche, a donde ingresó tras el accidente carretero.

El tío de la joven estudiante contó que Beatriz vino a la ciudad de Arequipa la semana pasada para someterse a una exitosa extirpación de quistes en los ovarios, descansó por cuatro días en el hospital Honorio Delgado y la estudiante fue dada de alta la mañana del lunes.

Su madre le dio alcance para acompañarla de retorno a La Joya en el bus de Santillana, pues la joven se recuperaría en su vivienda. “Mi hermana y su hija no llegaron a la casa y nos enteramos que habían sufrido un accidente en la carretera y todos vinimos a Arequipa. A María la internaron en el Goyeneche y a mi sobrina en el Honorio Delgado”, contó Rodolfo Clavijo.

Pidió que su hermana aún no sea dada de alta, pues no puede valerse por sus propios medios. Tiene fisuras en los pies y cortes en la cabeza.

LLANTO. Durante la mañana de ayer, los cuerpos de ambas mujeres fueron retirados por sus familiares de la morgue. A Cristina Vilca la velarán en el local social de Villa La Joya mientras que las exequias de Beatriz Chambi será en el del pueblo joven Primavera. Ambas serán sepultadas en el cementerio municipal, en nichos donados por la comuna de La Joya.