El Estadio Revolución Peruana fue fundado con el nombre de Strong Boys en setiembre de 1945 por la directiva de la desaparecida Sociedad Urbanizadora Mariano Melgar. Entre los integrantes de esta organización destacó el promotor Florencio Callata Laura, quien al fallecer dejó la posta a su hijo Ernesto Callata Casani.
En los planos originales de la sociedad se aprecia que el directivo Roberto Paz reservó el terreno para la construcción de un estadio con las medidas reglamentarias para la práctica del fútbol.
No obstante, para dar pase a la construcción de la Iglesia Señor de los Milagros y las escuelas López de Romaña y Divino Niño de Amor, se tuvo que reducir el área a un estadio oficial pero con las medidas mínimas.
Los directivos de esa época mejoraron el campo con faenas dominicales, retirando piedras debido a que el lugar fue una torrentera la que fue canalizada para evitar el ingreso de las aguas de lluvia. Por entonces Mariano Melgar era anexo de Miraflores y la alcaldesa Aida Caballero, atendió el pedido de ayuda y asignó maquinaria pesada para los trabajos.
MEJORAS. Con el paso de los años se hizo mejoras hasta convertirlo en un estadio oficial y fue utilizado para los torneos de Primera y Segunda División y las etapas de la Copa Perú. En 1952 fue inaugurado con el nombre de Strong Boys, a la ceremonia asistieron las autoridades, directivos y pobladores.
Antes de colocar la primera piedra enterraron una botella de vidrio que contenía el acta de fundación en el arco oeste. El primer cotejo jugado fue entre Strong Boys de Mariano Melgar y Unión Miraflores, al finalizar se vivió una fiesta.
En1955, los vecinos liderados por Florencio Callata, Augusto Sandoval e Ignacio Pano, desalojaron a un grupo de invasores en una batalla campal con heridos de consideración.
En la gestión del alcalde Julio Velásquez, pretendieron construir losas deportivas y depósito municipal en el campo de fútbol. Una noche se reunieron directivos de la Liga de Fútbol de Mariano Melgar, jugadores y pobladores, quienes arrojaron el material de construcción empleado para la obra, a la torrentera y todo volvió a su estado anterior, aunque el diseño no es precisamente el correcto, debido a los constantes afanes de restarle espacio.
En el periodo del alcalde Augusto del Castillo, se regulariza la documentación del campo Revolución, se siembra el pasto, se construye camarines, servicios higiénicos y el cerco perimétrico de metal. desde entonces queda bajo la administración de la municipalidad.
En la segunda gestión de Óscar Ayala Arenas, el Ministerio de Economía y Finanzas premia a la comuna distrital por las metas cumplidas, y le ofrecen construir un hospital con una inversión de cien millones de soles.
La autoridad formó una comisión integrada por los regidores de su bancada quienes formulan un proyecto de Ley, para que le cedan 15,600 m2 de otro predio en las calles Ica y Junín, pero la gestión no prospera.
En el 2014 se tenía el presupuesto disponible, pero al no contar con terreno, optan por el campo Revolución, y en una sesión los regidores aprueban cederlo a la Gerencia Regional de Salud de Arequipa (Geresa).
Enterados los vecinos y directivos de la Liga de Fútbol que tiene personería jurídica, entabla una demanda contencioso administrativa en el Poder Judicial para oponerse al proyecto. Además, acusaron al alcalde por abuso de autoridad y falsedad genérica por presunto uso de documentos falsificados para alcanzar su objetivo. La autoridad edil a su vez demanda a los dirigentes por oponerse a la construcción del nosocomio.
Al estar judicializado el asunto, la Geresa no puede tomar posesión del bien, para ello pide a la comuna melgariana, ampliar la vigencia del acuerdo por tres años y más adelante por otros dos. Los plazos han vencido y no hay una decisión final.
El alcalde Edwin Martínez, hizo el cambio de uso del predio de deportes a salud en la Municipalidad Provincial de Arequipa, pero la inscripción a favor de la Geresa no prespera debido a que es materia de acción legal.
Los regidores de la gestión 2019-2022 tendrán en sus manos resolver el pedio de la gerencia de de salud, que está demandando ampliar otros dos años más, la cesión que le aprobaran en la segunda gestión de Óscar Ayala.
100 millones de soles es la inversión pendiente para construir un hospital en el distrito.