Luego de nueve días del huaico que arrasó varias viviendas ubicadas en el cauce de la torrentera de Pichu Pichu, en el distrito de Paucarpata, la situación de cerca de 50 familias damnificadas sigue siendo riesgosa.
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El miedo a la ocurrencia de un nuevo huaico los invade, no obstante, la mayoría no quiere retirarse de sus casas pese a que fueron notificados por la comuna distrital de Paucarpata el último miércoles .
El alcalde de esta jurisdicción, Luis Cornejo, dijo que cerca de 35 familias de la Villa Pichu Pichu y Girasoles han presentado documentos en donde sustentan que tienen procesos administrativos abiertos de adjudicación de terrenos, sin embargo, esto es evaluado por Asesoría Legal para las acciones legales pertinentes.
Tres miembros de Defensa Civil visitaron la zona en horas de la mañana de ayer para levantar el empadronamiento final de viviendas.
La pobladora de la Quinta San José, Sonia Vilca Q. (41), expresó que no se retirará de su precaria vivienda. “No tengo a dónde ir, vivo con mis cuatro hijos”, señaló angustiada.
“No me iré, pero yo quisiera que el concejo provincial nos reubique en los terrenos que están dando”, indicó Dionicia Zabalaga, miembro de una de las tres familias afectadas en Picchu Picchu.
En tanto, Ángel Benegas M. (36), sobrino de fallecido por huaico, señaló que el apoyo prometido por las autoridades aún no se hace efectivo.