Los médicos del hospital Honorio Delgado no cuentan con las suficientes armas para enfrentar la expansión de la pandemia del coronavirus, pese a que este este establecimiento fue elegido para atender a los pacientes COVID-19 de Arequipa.
En el último informe de Contraloría General de la República, realizado tras la visita de los auditores entre el 21 y 22 de abril, hallaron una serie de carencias que ponen en riesgo la salud del personal médico y de los pacientes.
El área de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) para los pacientes COVID-19 solo cuenta con 5 ventiladores mecánicos operativos. Trasladaron 6 equipos del nosocomio de Camaná y 2 del Hospital Geriátrico, pero 6 de ellos no funcionaban por falta de accesorios. Necesitan 37,335 mil soles para reactivarlos.
La situación también es crítica por la falta de ambientes en las áreas de Emergencia y UCI para la atención de los pacientes infectados. En la inspección también verificaron que el nosocomio no cuenta con triaje, salas de observación, tópicos, entre otros.
En los pocos ambientes del centro hospitalario también hay carencia de instrumentos. De los 95 equipos biomédicos que debería existir en el área de Emergencia según el Ministerio de Salud, el Honorio Delgado solo tenía 30.
En UCI la situación es similar, de los 31 instrumentos biomédicos que deberían contar, solo se existía 19.
La falta de implementos de bioseguridad fue otra carencia encontrada. El 15 de abril, el nosocomio no tenía alcohol en gel y el 17 de abril ya se había agotado las mascarillas para el personal de salud y administrativo.